Ayer contábamos la noticia de que Héctor Barberá había sido pillado en un control de alcoholemia con una tasa de 0,67 mg/l, muy superior a la permitida. El hasta ahora piloto del Pons Racing tuvo que acudir esta mañana a los juzgados de Valencia en donde se le ha condenado a no conducir vehículos de motor durante un año y a 22 días de trabajos a la comunidad.
Después de conocer la sentencia, el equipo de Sito Pons ha decidido tomar cartas en el asunto y zanjar la relación con el piloto valenciano. Barberá intentaba acostumbrarse a la montura de Moto2 del Campeonato del Mundo de MotoGP con ellos, tras ocho años en la categoría reina del mundial de velocidad.
El Pons Racing ha publicado un comunicado confirmando el fin del contrato
El control al que se sometió Héctor Barberá no fue rutinario, los agentes le hicieron la prueba tras ver "que conducía de forma descuidada, a gran velocidad y efectuando maniobras de derrapaje y frenado de forma injustificada”, según recoge la sentencia publicada por el juzgado número 9 de Valencia.
Por esto, el Pons Racing ha lanzado esta noche un escueto comunicado en el que confirman que la rescisión del contrato laboral que les unía para esta temporada se deben a los hechos ocurridos en la noche del 7 de junio, que fue en la que sucedió todo, tal y como se confirma con la sentencia.
PONS Racing rescinde el contrato con Héctor Barberá ➡️ https://t.co/ByT3W7szoa
— PONS HP 40 (@pons_racing) 8 de junio de 2018
En el pasado el piloto de Dos Aguas ya tuvo otros problemas similares: en 2013 también dio positivo en un control, por lo que se retiró el permiso de conducir. Posteriormente también fue detenido por la policía al estar al volante de un vehículo cuando todavía no había terminado de cumplir el periodo de sanción. Su último escándalo vino de la mano de la que era su novia, cuando fueron condenados por una pelea doméstica en la que ambos se agredieron.
En ninguna de esas ocasiones sus actos habían tenido repercusión en su trabajo como piloto profesional y había continuado disputando las carreras del mundial de velocidad. Esta vez el Pons Racing ha decidido poner fin al contrato y Barberá se queda sin equipo cuando sólo ha transcurrido un tercio de la temporada. Ahora queda ver si otro equipo confiará en él.
El propio piloto publicaba un comunicado en sus redes sociales arrojando su punto de vista de lo ocurrido y asegurando que está siendo un momento muy complicado tanto para él como para su familia y amigos.