El mercado de equipos satélites de MotoGP que ya estuvo bastante movido durante la pasada temporada podría tener una segunda parte en 2022. Aprilia, que ya por entonces estaba abierta a tener un equipo asociado pero no lo encontró, ha vuelto a mostrar su disponibilidad. El objetivo es tener cuatro motos en la parrilla.
El mayor problema es que todos los contratos de los equipos satélites están recién firmados y solo uno, el del RNF Racing de Yamaha, concluye al final de la presente temporada. Por lo tanto, con los contratos en mano, parece difícil que Aprilia tenga su equipo satélite, pero hay algunas carambolas que le podrían beneficiar.
Yamaha se podría quedar sin satélite, salvo que picotee en Ducati
"Si recibimos ofertas interesantes que pueden hacer que el proyecto crezca, lo valoraremos", aseguraba Massimo Rivola, el director general del equipo Aprilia. El año pasado ya se quedaron con la miel en los labios cuando Gresini Racing y VR46 decidieron irse con Ducati a montar una super estructura de ocho motos.
El único equipo satélite de MotoGP que concluye su contrato al final de la temporada es el RNF Racing, el antiguo Petronas, que firmó con Yamaha un contrato por varias temporadas pero que había que renovarlo año a año. Técnicamente, sería la única opción de Aprilia para tener un equipo satélite sin romper un contrato.
Recordemos que el LCR de Lucio Cecchinello tiene contrato con Honda hasta 2026, igual que el Tech3 con KTM. Mientras, entre los equipos de Ducati, el Pramac tiene vínculo con Borgo Panigale hasta 2024, igual que el VR46 de Valentino Rossi. El contrato más corto es el de Gresini Racing, solo hasta 2023.
Resulta difícil imaginar que Yamaha se vaya a quedar sin un equipo satélite, por lo que la opción de que sea el RNF Racing el que se vaya a Aprilia sin reemplazo parece complicada. Sin embargo, cierta carambola que se rumorea en el paddock desde hace un tiempo podría resolver este particular sudoku.
El RNF Racing podría ser el equipo satélite de Aprilia si VR46 se desvincula de Ducati para ir a Yamaha. Que Valentino Rossi esté separado de la marca de los diapasones sonó extraño desde el principio, y hay quien especula con recuperar ese vínculo. El problema son los pilotos, ya que Yamaha querría algo más que los de la Academia VR46.
Lo que está claro es que la única marca de MotoGP que de momento no tiene un particular interés en tener un equipo satélite es Suzuki, ni siquiera con la llegada de Livio Suppo. Ellos parece que están estudiando más bien crear una estructura asociada en Moto2, similar a la que tiene KTM con Ajo, Honda con Asia Team o Yamaha con el Master Camp.