De vez en cuando el archiconocido Keanu Reeves aparece en nuestras vidas no como actor, sino como amante de las dos ruedas. Hemos hablado mucho acerca de su pasión por este tipo de vehículos. Tiene tanto dinero y le gusta tanto el mundo de las dos motos que incluso creó Arch Motorcycle junto con Gard Hollinger, el otro cofundador.
Ahora traemos un vídeo (en inglés) que resumimos a continuación en el que la revista GQ habla con él sobre su colección de motos y sobre su historia personal en este mundo.
Amante de las Norton
Keanu Reeves creció en Toronto rodeado de moteros y su afición empezó a crecer a la edad de 10 años. Aprendió a conducir una moto cuando estaba rodando una película en Munich. Había una mujer que pilotaba una Enduro y el intérprete le pidió unas clases. Cuando volvió a Los Ángeles, en 1986 o 1987 (Reeves no está seguro de la fecha) se compró su primera moto.
La primera joya que muestra de su colección, ubicada en Hawthorne (California), es una Norton Commando 850 MKA2 negra de 1973 que fue la segunda moto que tuvo en su vida y que compró en el año 1987. El actor reconoce que creció amando esa marca y que hizo muchos kilómetros con la Commando 850 a finales de los 80.
La segunda bestia mecánica que muestra es la moto con la que Carrie-Anne Moss (Trinity) apareció en The Matrix Reloaded. Es una Ducati 998 Reloaded Edition del año 2004 con un color especialmente creado para la película con el nombre de dark green. La actriz tuvo que aprender a conducir una moto ya que hasta entonces no tenía ni idea.
Tampoco podían faltar las motos de su creación en Arch Motorcycle. La primera máquina en la que empezó a trabajar fue en una customización de una Harley-Davidson Dyna Wide Glide que se había comprado y que se convirtió en un prototipo de lo que luego sería la KRGT-1, la primera motocicleta de la marca.
La KRGT-1 se desarrolló a partir de un diseño con aspecto de custom moderna. Tiene un enorme motor bicilíndrico en uve de dos litros de cubicaje. Tiene horquilla invertida y frenos radiales. Es larga, baja y sus llantas son enormes. Las placas del motor, palancas y estriberas son parte de las 200 piezas manufacturadas expresamente en Los Ángeles.
Con esta moto subió la colina de Goodwood hace unos años. Su precio de venta al público no es para todos los bolsillos: parte de los 70.500 euros con una entrada de 13.500 euros. También habla en el vídeo de la Arch 1S, una versión más deportiva que la KRGT-1 con una postura de conducción ligeramente más agresiva.
Por último, este canadiense nacido en el Líbano de 54 años habla con una sonrisa en la cara de la METHOD 143 una moto muy exclusiva que presentó en Milán hace un par de años. Solo se fabricaron 23 unidades muy especiales en las que mirásemos por donde mirásemos solo había fibra de carbono, tanto en el chasis como en otras piezas. Cada una de las motos montaba un motor de 2.343 cc. Con un precio que sobrepasaba los 100.000 euros le valió el honor de meterse entre nuestras motos más caras de 2017.
El actor de Hollywood no pudo evitar mencionar su amor por la velocidad al mostrar una Yamaha R1 o una Kawasaki Ninja ZX-10R . En noviembre de 2017 estuvo en el Gran Premio de Valencia y en enero de 2018 disfrutó de unas tandas libres en Cheste con la ayuda y compañía de Nico Terol.
Aunque no lo mencione en el vídeo, también tiene la Vyrus 987 C3 V4 en su colección y como las motos son un mundo que a todos nos gusta, Reeves no iba a ser menos y reconoce que le encantaría tener otras motos como una Vincent Black Shadow de 1955 o una Brough Superior de 1927 (fabricante de motos británicas). También se muerde los labios al decir que le encantaría conducir una MotoGP.
También habla de algunas películas en las que aparece montando en moto como Chain Reaction, My Own Private Idaho (en la que aparece conduciendo una Norton amarilla) y en John Wick: Parabellum en la que está sentado en una Yamaha MT-09. Con su afición a las dos ruedas no dudamos de que Keanu Reeves nos sorprenderá montando en moto en otras películas o sacando nuevos productos en su marca.