El Motocross es sin duda uno de los deportes más duros y exigentes del mundo, pero no sólo para sus pilotos que tienen que estar más fuertes que el vinagre, sino también para todo el equipo encargado de participar en una competición de esta disciplina al más alto nivel.
Para este año 2019 los equipos del Campeonato del Mundo de Motocross disputarán un total de 19 citas, cada una con dos mangas más la carrera clasificatoria y el Motocross de las Naciones a final de temporada. Con una agenda tan apretada alrededor de todo el mundo es normal que las escuadras cuenten con unas instalaciones tan impresionantes como las que muestra el equipo Wilvo Yamaha MXGP.
¿Quién no querría trabajar así con sus motos?
Los pilotos encargados de llevar las Yamaha YZ-450F al máximo en los circuitos del mundial serán en 2019 Gautier Paulin y Arnaud Tonus, pero detrás de ellos se encuentra una armada de mecánicos, ingenieros, preparadores, expertos en logística...
Una enorme superficie repleta de estaciones de trabajo donde preparar las motos con una pulcritud que da miedo. Todas las monturas perfectamente alineadas junto a unas mesas sobre las que se podría comer, incluso en el suelo. Gimnasio con vistas, zona de reuniones, bar, oficinas, salón comedor con cocina, actividades de esparcimiento o habitaciones de descanso con literas a disposición de los empleados son el entorno de trabajo más lujoso y limpio que podrías imaginar para un deporte donde el barro, el polvo y la arena son una constante.
Pese a lo impresionante de sus instalaciones, el equipo Wilvo Yamaha MXGP ni siquiera es un equipo top. Se trata de una de las escuadras privadas más potentes de la categoría máxima del Motocross, con apoyo oficial de Yamaha, pero no llega a ser un equipo 100% de fábrica. Si lo fuera de hecho posiblemente no habríamos podido disfrutar de este vídeo.