Kawasaki está actualizado todos sus modelos de cara al nuevo curso. Si hace unos días os hablábamos de la Kawasaki Vulcan S, en esta ocasión le ha llegado el turno a la superventas de la gama, la Z900, que de cara al 2022 inaugura una nueva versión tope de gama con mejoras importantes tanto en su parte ciclo como en su acabado exterior.
El nuevo modelo recibe la denominación comercial de Kawasaki Z900 SE (Special Edition). Esta versión, que llegará con unos frenos Brembo y una suspensión Öhlins, se posiciona como una de las motos favoritas por los usuarios gracias a la limitación que se le puede efectuar para conducir con el carnet A2.
Kawasaki Z900 SE: una edición especial con mejoras importantes
Aprovechando que la gama Kawasaki se está actualizando para 2022, los de Akashi han lanzado una versión Special Edition mejorando la parte ciclo de su Z900. Para ello han tomado prestadas las mejoras introducidas recientemente en la Kawasaki Z900RS SE de aspecto retro y las han incluido en este modelo superventas.
Y como os podéis imaginar el resultado de esta combinación ha sido perfecto. Para empezar la Kawasaki Z900 SE estrena una decoración que combina la pintura negra y el clásico verde de Kawasaki en su carrocería, mientras que otros detalles como las botellas de las horquillas se tiñen de dorado para darle un aspecto mucho más deportivo.
Pero sin duda donde más ha mejorado esta Z900 Special Edition ha sido en su parte ciclo. Al igual que ocurría en su hermana de corte clásico, el amortiguador trasero se ha sustituido por un monoamortiguador Öhlins S46 que incluye un pomo de regulación remoto para la precarga con su característico color amarillo. La horquilla delantera sigue siendo la misma unidad de 41 mm de diámetro, pero se han ajustando los cartuchos y los muelles para ser un poco más firme.
En cuanto a sus frenos, el eje delantero utiliza ahora unas potentes pinzas de cuatro pistones monobloque y anclaje radial firmadas por Brembo, concretamente las M4.32. La bomba del freno radial sigue siendo una Nissin mientras que los latiguillos de origen se han sustituido ahora por unos metálicos que aguanten mejor la fatiga. Por su parte, los discos de freno siguen siendo de 300 mm.
No se anuncian cambios para el apartado mecánico, así que se seguirá utilizando el mismo bloque de cuatro cilindros con 948 cc y 125 CV de potencia. Tampoco hay una revisión tecnológica, manteniendo el ABS, el control de tracción con tres niveles o la conexión del smartphone a la pantalla de instrumentos.
Lo que no sabemos aun es el precio que tendrá esta versión en nuestro mercado pero teniendo en cuenta que el modelo básico sale desde los 9.699 euros, dudamos que estas mejoras incremente el precio mucho más allá de los 2.000 euros.
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