Hace solo cuatro meses desde que Carlos Ezpeleta, director deportivo de MotoGP, anunciase a bombo y platillo que Honda y Yamaha iban a recibir concesiones para salir de la crisis en la que estaban inmersos. Sin embargo en menos de medio año la situación ha girado radicalmente, y ya hace semanas que no se sabe nada de esas supuestas concesiones.
Parece que el resto de marcas están bloqueando las ayudas a las japonesas. Principalmente una, KTM, que como venganza a la decisión de Dorna de no concederles dos motos más para 2024 estaría bloqueando las concesiones para Yamaha y Honda. Los de Iwata andan muy enfadado, y les han señalado directamente.
KTM disfrutó de concesiones desde 2017 hasta 2020
Pit Beirer, el mandamás de KTM, ya aseguró que no apoyaba las concesiones a Honda y Yamaha amparándose en que Álex Rins había ganado una carrera. Y es que, ciertamente, con el antiguo formato de concesiones ni Honda ni Yamaha tendrían derecho a ellas para 2024 en función a sus resultados.
"En el pasado, Honda y Yamaha han permitido estas concesiones a otros fabricantes cuando llegaron", recuerda ahora Lin Jarvis, el jefe del equipo Yamaha. Y es que cuando las dos japonesas gobernaban MotoGP permitieron que Ducati, Suzuki, Aprilia y KTM gozasen de privilegios para poder ponerse a la altura.
Jarvis añade que "es importante tener cinco fábricas competitivas para el interés de los aficionados, tanto en el circuito como en la televisión". Tanto Honda como Yamaha reclaman poder gozar de las concesiones ahora que están en una situación de apuro, igual que ellas permitieron que otras marcas las tuviesen.
Además el jefe de Yamaha tiene claro qué es lo que necesitan para ponerse al día. "Hacen falta más neumáticos de prueba y más días de test, además de un paquete aerodinámico adicional para el resto de la temporada", explica Jarvis, aunque añade que "también sería bienvenido el desarrollo de motores después del inicio de temporada".
Yamaha va camino de acabar la temporada 2023 sin ganar ni una sola carrera, algo que no sucedía desde 2003, justo la temporada previa al fichaje de Valentino Rossi. Además, por primera vez en toda su historia es muy probable que Yamaha acabe el mundial en la última posición de la general de marcas. Lo está luchando contra Honda.
Veremos si finalmente KTM le devuelve el favor a Yamaha y Honda dejando de bloquear las concesiones para las marcas japonesas en MotoGP.