Marco Simoncelli ha vuelto a ser el gran protagonista en la categoría de 250 cc y una vez más lo ha sido por su extrema agresividad, rozando la temeridad, en las últimas vueltas. El italiano ha protagonizado una gran colada en la penúltima vuelta que se ha saldado con Álvaro Bautista, que en ese momento era líder, fuera de la trazada y relegado hasta la tercera plaza.
El gran beneficiado del lance ha sido Mika Kallio, que hasta ese momento estaba siendo un mero espectador de la lucha entre Bautista y Simoncelli, y de repente se ha encontrado con una victoria servida en bandeja de plata.
Una vez más Simoncelli ha conseguido que se hable más de temas extradeportivos que de la propia carrera. El hecho de que lleve una moto inferior no me parece una excusa para su comportamiento. El motociclismo es un deporte de caballeros donde todos los pilotos se están jugando la vida y no se puede permitir que un 'kamikaze' de este calibre ponga en peligro el pellejo de los demás. Viendo que el toque de atención que le dio la organización en Montmeló no ha tenido efecto, habría que estudiar otras medidas.
Volviendo a lo puramente deportivo, hasta la colada de Simoncelli la carrera había ofrecido un bonito espectáculo con el duelo de cabeza entre el italiano y Álvaro Bautista. El español, que salía desde la ‘pole’, no realizó una buena arrancada y tuvo que arriesgar bastante en las primeras curvas para no perder la rueda del italiano. El de Talavera tuvo perfectamente controlado a Simoncelli durante toda la prueba y, en condiciones normales hubiera tenido todas las papeletas para llevarse la victoria.
Con Simoncelli y Bautista liderando la prueba, la pelea estaba por detrás. Mika Kallio, que salía desde la duodécima posición, hizo valer las virtudes de su KTM sobre el trazado de Donington y logró remontar hasta la tercera posición. Al final, se llevó la victoria por sorpresa. Por su parte, Hector Barberá fue cuarto, mientras que Álex Debón y Julito Simón fueron sexto y séptimo, respectivamente. Más atrás terminaron Aléix Expargaró, décimo; Héctor Faubel, decimoquinto, y Rusell Gómez, decimoctavo.
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