Aunque a Jorge Martín las cosas le van mejor que nunca corriendo en Pramac Racing, el piloto madrileño nunca ha ocultado que su objetivo final es ser piloto de fábrica. A Jorge Martín le han llegado sondeos de Yamaha y de Honda, pero su sueño es pilotar la Ducati roja. Y parece que vuelve a tener opciones.
Según publicaba el Diario AS la semana pasada, Martín vuelve a tener opciones de subirse a la Ducati de fábrica la próxima temporada. Para ello tendría que ganar el mundial de MotoGP, pero incluso en ese escenario, no sería tan fácil. Y es que los contratos que ha firmado Ducati podrían frenarlo.
Ducati ratificó el contrato de Bastianini para ser oficial en 2024
Martín está siendo la sensación de la temporada en MotoGP. Cuando solo quedan tres Grandes Premios para el final tan solo está a trece puntos de distancia de Pecco Bagnaia en la clasificación general, su tendencia es al alza y la posibilidad de que sea él quien luzca el número '1' en 2024 cada vez parece mayor.
Es eso lo que atrae a Ducati, que vería extraño tener al campeón del mundo corriendo en un equipo satélite. No solo es una cuestión de estatus, sino también de dinero. Por un lado, Martín cobra un millón de euros extra cada año que corre con una Ducati sin ser de fábrica. Por el otro, la prima de Lenovo por patrocinar la moto aumenta si lleva el '1' en la cúpula.
Pero ese mismo argumento es el que esgrime Pramac Racing. El equipo de Paolo Campinoti también quiere retener a Martín si es campeón del mundo por motivos económicos. La prima de Prima, valga el chiste, es mayor si son el primer equipo satélite de la historia de MotoGP que lleva el '1' en la cúpula.
En cualquier caso, el mayor problema que tendría Ducati es contractual. Porque ratificaron a Enea Bastianini un contrato que dice que correrá en el equipo de fábrica la próxima temporada. Ducati tenía la opción de mandar a Bastianini al Pramac Racing, pero el 30 de agosto caducó esa opción y confirmaron a Bastianini en el equipo de fábrica para 2024.
Así que si ahora quisieran dar marcha atrás en la decisión para subir a Martín al equipo de fábrica tendrían que convencer a Bastianini de que renunciase a su contrato y bajase al Pramac Racing, algo para lo que probablemente haría falta una buena cantidad de dinero. En Borgo Panigale, de momento, no hablan de la situación.
Pero si Jorge Martín finalmente consigue ser campeón del mundo, probablemente a Ducati le va a tocar tomar una decisión difícil.