Nada es sencillo en el Campeonato del Mundo de MotoGP y sino que le pregunten a Ducati. Por un lado tienen a Andrea Dovizioso que ayer destapó que aún no había recibido ningún tipo de oferta pero, que en caso de haberla, ya vería lo que hacía; por otro tienen a un Jorge Lorenzo que todavía no está al cien por cien sobre su montura.
Pero todos se muestran muy optimistas con que los resultados sean buenos, el italiano está centrado en darles un campeonato, la fábrica tiene plena confianza en sus pilotos y el mallorquín repite hasta la saciedad, porque está realmente convencido, que pronto conseguirá encajar todas las piezas.
"En cuanto esté tranquilo irá fortísimo"
El pasado Gran Premio de Catar fue un comienzo difícil para Jorge Lorenzo tras quedarse sin frenos y tener que abandonar la carrera. Un hecho por el que Brembo, el fabricante, ha admitido su culpa, gesto que agradece el mallorquín aunque ya ha pasado página y prefiere centrarse en los resultados: "Le agradezco a Brembo que haya decidido asumir la responsabilidad, es un gesto agradable, porque todos cometemos errores. Solo puedo trabajar duro, confiando en las instrucciones de los ingenieros, dentro de mí sé que puedo ser rápido".
Que el agua volverá a su cauce es algo en lo que todos creen, ya lo dijo su compañero Andrea Dovizioso antes de la carrera en Losail y también lo recalca Davide Tardozzi, el team manager de Ducati, que piensa que el único problema que tiene el español es que está algo nervioso por esa falta de resultados positivos.
"Lo estamos analizando profundamente, también con el propio Jorge. Le costó al comienzo pero desde la mitad del año pasado mejoró mucho. Incluso en Valencia, en la última carrera, era muy rápido. También va fuerte en mojado. En la primera carrera de esta temporada tuvo mala suerte pero en los test invernales fue muy rápido en Sepang. Quizá Jorge esté un poco nervioso. Le cuesta un poco, pero tiene un gran talento. No hay dudas. Estoy seguro de que en cuanto él esté más tranquilo, concentrado, irá fortísimo", explicó Tardozzi a Marca esta misma semana
Sea por lo que sea Lorenzo es el primero que sabe que tiene que trabajar para demostrar que no se equivocaron con su fichaje: "Con Ducati tengo que perseverar. El objetivo está más cerca de lo que parece. Esta es una moto especial, que debes conducir más allá de la lógica. Estoy trabajando y estoy convencido de que al final los resultados llegarán", señalaba a GPOne durante uno de sus encuentros con los medios ayer en Termas de Río Hondo.
El futuro y la renovación no es algo que preocupe demasiado al 99, "de eso se encarga Albert Valera", recuerda en referencia a su representante. Él sólo quiere centrase en la pista y su Desmosedici con la que reconoce que Ducati ha hecho un gran trabajo en invierno: "La moto gira más en las curvas. Se ha mejorado la potencia y es más rápida. Pero a altos regímenes sigue siendo nerviosa y ese es un problema que vamos a tener toda la temporada porque los motores están congelados, por lo que no hay que perder ni un minuto en pensar en ello", comentaba.
A pesar del positivismo del mallorquín, su lenta adaptación a la montura italiana ha hecho que comiencen los rumores de su posible salida hacia Suzuki: "Creo que en este momento hay dos pilotos capaces de marcar la diferencia cuando nos sentimos cómodos en una motocicleta. Uno es Márquez y el otro soy yo. Marc ha demostrado que sabe cómo ganar diez carreras seguidas, mientras yo gano y corro con una clavícula rota", aseguraba, comprendiendo el posible interés de otras marcas.
Quizá por esa visión de sí mismo Lorenzo no quiere excusas de ningún tipo, así que no ha querido recalcar las dificultades que viene teniendo Ducati en Argentina como algo a tener en cuenta: "Hoy en día en MotoGP no se puede afirmar nada con convicción; todo está tan igualado y cambia tanto de un circuito a otro que cuando parece que has encontrado la solución, llegas a otro y vuelves a tener dificultades. Eso le va a suceder a todos los pilotos de todas las marcas. No hay circuitos buenos ni malos, al menos esa es mi mentalidad", admite.
También es consciente de que la preparación del que maneja la moto es algo fundamental para conseguir esa buena sintonía: "Estoy obsesionado con el trabajo y con mejorar mi condición física todavía más. Ganar más fuerza, estar más fuerte y ser un piloto más muscular. Intentar adaptarme lo mejor posible a la moto y dar las indicaciones adecuadas a Ducati para que haga una moto más del mi estilo si es posible", concluye el de Palma.
Fotos | MotoGP, Ducati
En Motorpasión Moto | GP Argentina