Parece una broma, pero no. Detrás de la infinidad de patinetes eléctricos que encontramos repartidos por las ciudades hay un ejército de trabajadores que se encargan de reponer, cargar, reparar y estacionar en puntos estratégicos los patinetes eléctricos de alquiler.
Pues bien, uno de estos trabajadores ha sido noticia en Sevilla porque se ha ganado a pulso una multa cuando la Policía Local le ha cazado montando a la vez en seis de estos Vehículos de Movilidad Personal (VMP).
Montando en seis patinetes y transportando otros 72 en furgoneta
La Ordenanza que regula estos dispositivos entró en vigor este mismo mes de noviembre, por lo que las autoridades han comenzado una campaña de vigilancia centrándose especialmente en el aparcamiento, pero también poniendo coto a las empresas de alquiler que deben ajustarse a la legalidad sevillana en cuanto a unos requisitos de número máximo de vehículos, potencia máxima (muchos modelos se exceden) y aparcamiento.
Enmarcado dentro de la campaña de vigilancia una patrulla de la Policía Local de Sevilla se encontró con un espectáculo en vivo. Uno de los encargados de recoger y distribuir los patinetes eléctricos de una empresa de alquiler fue sorprendido mientras circulaba montado en seis patinetes eléctricos a la vez.
El trabajador además de ser pillado por los agentes del orden, también fue inmortalizado para la ocasión. Suponemos que en su cabeza era un plan perfecto, consiguiendo ahorrarse cinco paseos de una sola tacada. La propia Policía Local de Sevilla ha sido la encargada de hacer público modus de este trabajador a medio camino entre reponedor de patinetes eléctricos y acróbata del Cirque du Soleil, pero su hazaña no se ha quedado ahí.
Tras proceder a notificar al infractor, los agentes inspeccionaron la furgoneta en la que estaba transportando los patinetes y se dieron cuenta de que estaba transportando una cantidad excesiva de VMP en su interior: ¡72 patinetes!, todos sin atar y dos de ellos metidos en la parte delantera, por lo que fue sancionado por estiba deficiente y transporte de objetos que pudieran poner en riesgo a la conducción, según informan desde Europa Press.
La furgoneta fue inmovilizada hasta que no se personó una segunda en la que poder repartir la carga y realizar tanto la estiba como el transporte con seguridad. Pero lo peor de todo es que la empresa de este trabajador está operando en Sevilla de manera irregular, sin la correspondiente autorización municipal de actividad económica. En este caso se trata de Bird.
En Sevilla acaban de estrenar la nueva Ordenanza de Movilidad con la que el consistorio andaluz está tratando de poner orden entre la masificación de los patinetes eléctricos. La proliferación de estos VMP está provocando malestar entre los peatones y resto de usuarios de la vía, pues suponen un problema en la forma en la que quedan estacionados por la ciudad.
La ausencia de regulación y el deficiente uso que se está dando a los patinetes eléctricos provoca que muchas zonas de la ciudad se vean invadidas por estos dispositivos, diseminados de cualquier manera en aceras, tirados sin orden y obstaculizando la movilidad de los peatones o incluso interferir en la visibilidad de la señalización.
El 'todo vale' no es una opción cuando se trata de la utilización de espacios públicos. No sabemos muy bien si ha sido por una pillería, si por un acto de vandalismo light o porque el descontrol está llevando a los viandantes a tomarse la justicia por su mano, pero en una sola noche la Policía Local retiró 27 de estos patinetes eléctricos abandonados en zonas públicas y/o peatonales, uno de ellos colgado de una señal de tráfico.
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