A medida que pasan los años las tecnologías van avanzando. Con ellas también aumentan las probabilidades de captar las irregularidades en carretera: ya no solo vale con radares móviles, sino que también hay drones, incluso los radares medusa que detecta el exceso de ruido.
Pues si parecía que los avances ya no podían llegar a más a estas alturas, alguien ha pensado en convertir al teléfono móvil en un arma de doble filo, y no solo para las autoridades. Han desarrollado una aplicación que pronto podría convertir todos los vehículos en radares móviles, y bastante más.
Enviará las infracciones directamente a la policía, que las podrá tramitar como denuncias
Las reglas de circulación están para cumplirse, de eso no cabe duda. Sin embargo, el control es cada vez más atosigante para los conductores, y entre ellos incluimos a motoristas y usuarios de todo tipo de VMP (bicicletas, patinetes eléctricos...).
Pues ahora, y según revela el Daily Mail, una empresa está a punto de sacar una aplicación para el móvil que pretende cambiar el panorama de los conductores e infracciones. Coches, motos... Todos se verán afectados. No solo convertirá a los conductores en radares móviles, sino que dará la potestad a los usuarios de denunciar algunos tipos de infracciones para que lleguen directamente a la policía. Aunque puedes respirar, porque por el momento solo se planea en Reino Unido.
Es dashcamUK, y está en trámites de salir al mercado inminentemente en el próximo mes de mayo. La idea es que cualquier usuario puede descargar la aplicación en su smartphone (Android o iOS). Una vez se capte la infracción a través de la cámara, solo hay que pulsar un botón y la app enviará la información a las autoridades. Solo hay dos requisitos: que haya infracción y que la app haya podido captar la matrícula del infractor.
Es decir, que no hay que pasar por un proceso de denuncia físico. Como si fuese una base de datos telemática y conectada con la policía, las imágenes se envían directamente a un portal policial, simplificando el proceso en comparación con una dashcam tradicional y evitando descargarlas, comprobarlas, recortarlas, denunciarlo...
DaskcamUK será capaz de grabar casos de conducción temeraria, cambios de carril sin indicación, saltarse semáforos en rojo o aparcar ilegalmente. Según los medios británicos, su función estrella será la de poder utilizarla como un radar de velocidad que capte excesos de velocidad. Los motoristas podrían dejar atrás conductas ilegales como pasar ilegalmente entre coches.
Sin embargo, parece algo improbable que un móvil de un usuario pueda captar excesos de velocidad, y que encima llegue una multa por ello. Un móvil no es considerado un cinemómetro homologado, y al menos en España, esa multa quedaría totalmente inválida si el aparato no ha pasado por manos del INTI (Instituto Nacional de Tecnología Industrial).
Para evitar que la memoria del teléfono se llene cada poco tiempo ya que funciona como una dashcam, grabando constantemente, se borran automáticamente las imágenes cada 30 segundos a menos que el conductor decida que no. Su funcionamiento es simple: cuando detecta la infracción, avisa al conductor para que toque la pantalla, capte la toma y la guarde para enviarla. También se podrá utilizar en motocicletas, en caso de tener un soporte que permita grabar.
Se podría pensar que no es más que una aplicación de terceros sin apoyo gubernamental, pero no. Su creador, un ucraniano llamado Oleksiy Afonin ya se ha reunido con el Consejo Nacional de Jefes de Policía de Reino Unido. Con ellos ha discutido y han llegado al acuerdo para que las imágenes puedan presentarse ante un tribunal como prueba.
También cabría pensar en que el propio conductor que manipule el móvil estaría cometiendo una infracción, pero no. En el consejo llegaron al acuerdo de que el usuario no infringirá la ley en caso de manipular el móvil, ya que solo bastaría con tocar la pantalla una vez para iniciar el proceso de denuncia.
¿Sería legal en España?
En España podríamos tener un problema. Ninguna ley prohíbe poner una cámara en el interior del coche, pero en caso de un accidente o juicio, las imágenes pueden no ser aceptadas como prueba ante el juez debido a la Ley de Protección de Datos de Carácter Personal.
Tal y como explicamos en su día en Motorpasión, la clave la encontramos en cómo se van a usar esas imágenes. Según recogíamos, está permitido utilizar una dashcam como prueba en accidente o incidente. lo ampara la regla del interés legítimo, contemplada en el Artículo 6 del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) y que se recoge en la normativa europea 2016/679,
"El tratamiento es necesario para la satisfacción de intereses legítimos perseguidos por el responsable del tratamiento o por un tercero", se estipula.
No se puede manejar en marcha. Como ocurre con el móvil, el sistema multimedia o un navegador, la normativa exige que no manipulemos la cámara estando en circulación. Y esto incluye estar parados en un atasco o semáforo.
Por otro lado, hemos visto que las redes sociales son un foco de denuncia. Muchos usuarios suben infracciones y las autoridades las denuncian después. De hecho, cualquier usuario puede grabar y enviar las grabaciones a la Guardia Civil de Tráfico.