Las nuevas Honda CBR1000RR SP y SP2 han supuesto un golpe sobre la mesa por parte de la casa del ala dorada. Un acicate para el renovado segmento de las deportivas y que está lejos de quedarse tal y como está. Es imposible no fijarse en las siglas SP y SP2 que acompañan a la nueva Fireblade 2017 y suelen indicar una radicalización del concepto. Pero, ¿no sería de esperar una versión básica, sin SP?
Pues sí, en efecto. Las nuevas Superbikes de Honda aún no tienen un precio por confirmar pero viendo su apartado de equipamiento repleto de tecnología avanzada y materiales de calidad sería lógico la irrupción a no mucho tardar de una Honda CBR1000RR Fireblade a secas, menos enfocada hacia los tiempos en circuito y, sobre todo, con un precio más humano.
Un precio para gobernarlos a todos
No tendremos que esperar demasiado para conocer a la hermana pobre de la familia Fireblade, en Asphalt and Rubber apuntan a que será en el inminente Salón de Milán a comienzos de noviembre donde haga su debut. En cuanto a las diferencias es fácil imaginar cómo será la CBR1000RR del pueblo.
Estéticamente no debería diferir mucho de las SP, donde sí habrá cambios es en materiales algo menos exclusivos, un escape y depósito que no sean de titanio, llantas no tan ligeras, ausencia de suspensiones Öhlins semi-activas por unas Showa convencionales y, quizá, una electrónica no tan avanzada (aunque no creo que vayan a renuniar a demasiado en este apartado).
En cuanto al motor de cuatro cilindros y 190 caballos de la versión SP no debería haber un paso atrás significativo, ya que no deja de ser una evolución de la que propulsaba el modelo 2016 y el grueso de las novedades mecánicas se centran en la SP2.
Ahora, la pregunta del millón es saber si con estos cambios, que no son demasiados, en Honda serán capaces de ajustar lo suficiente el precio como para rivalizar directamente contra las Yamaha YZF-R1 (20.900 euros) y Kawasaki ZX-10R (18.799 euros), dejando casi seguro a la Suzuki GSX-R1000 como la más barata con diferencia cuando se haga público el precio de la versión 2017.
Con la actual CBR1000RR a 16.999 euros y la SP por 19.979 euros, las nuevas 2017 tienen margen para posicionarse con un precio bastante razonable en el mercado de las deportivas. ¿Será suficiente para que la Fireblade pueda volver a reinar en las carreteras?