Hay motos con las que todos soñamos tener en algún momento de la vida. Sin embargo, digamos que el dinero o la falta de espacio son un verdadero inconveniente. Mientras, nos queda soñar y deleitarnos con el garaje que tienen en Crescent Yamaha, hogar del equipo Pata Yamaha en el WorldSBK.
Con sede en Reino Unido, los ingleses tienen una tienda de proporciones épicas. Y la exposición de motos se convierte en un garaje de ensueño, porque allí tienen una R1 Pro que tiene el mismísimo Valentino Rossi, o la moto que el ídolo de la F1 Lewis Hamilton construyó a medida para luego estrellar en circuito, entre otras.
La R1 de Rossi, Hamilton y Razgatlioglu... Pero más vale que tengas una buena cartera
La primera moto que podemos ver en este tour guiado por el youtuber 44Teeth es la Yamaha R1 de Lewis Hamilton, fabricada ex profeso para el campeón del mundo de Fórmula 1. Una moto a la que se ha subido en "dos o tres ocasiones", dicen desde el PATA Yamaha.
Tras coronarse campeón de F1 en 2018, Hamilton viajó a Jerez para subirse a una Superbike hecha a medida para él. Con ella se accidentó, aunque sin consecuencias. Desde entonces, está a buen recaudo en ese garaje.
La moto en cuestión luce en color negro, recubierta en fibra de carbono. Lleva las mismas especificaciones que una WSBK hecha a medida con piezas GYTR.
Suspensiones, frenos Brembo, gomas Bridgestone de competición (las mismas que utilizó, aún desgastadas), un basculante modificado, sistema de escape, ECU, árboles de levas... Absolutamente todo. 210 CV de pura potencia.
La otra máquina que merece especial atención es esta edición especial de la réplica de la R1 de Toprak Razgatlioglu con motivo del mundial que ganó el turco en 2021. Una bestia para circuito de la que solo existen 21 unidades en todo el mundo, a 46.000 euros cada una. Y una de ellas está aquí expuesta.
Una bestia de circuito con 205 CV a la rueda trasera que cuenta con un aumento de 20 CV respecto a la R1 estándar. En realidad, casi todas las mejoras vienen en el aspecto físico y de parte ciclo, porque como explica el propio gerente, excepto la ECU y el sistema de escape, las entrañas mecánicas permanecen intactas.
Eso sí, pesa 175 kg, con todos los líquidos (26 kg menos que la moto de serie), llantas Marchesini forjadas, sistema Brembo Racing, monta componentes de titanio y carbono por doquier, piñas oficiales y hasta una firma del turco en el colín de la moto. Verdadero objeto de deseo para todos los fans de la fábrica de Iwata.
La joya de la corona es la que han apodado como Yamaha R1 Pro. Una moto que dicen, es literalmente como una Superbike al alcance de cualquier humano. Y Yamaha ha sido la primera en traer al mundo real una WSBK accesible.
Solo hay tres de estas motos en todo el mundo. Valentino Rossi es el dueño de una de ellas, y que la "usa por divertimento". Y tiene todo lo que podríamos esperar de una moto que lleva un nueve veces campeón del mundo.
Es tan avanzada que ni siquiera dejan correr con ella en el British Superbikes. Su precio es de 150.000 libras, más de 170.000 euros al cambio. Es la misma moto que llevan Razgatlioglu y Locatelli; ECU, suspensiones, frenos, depósito modificado, basculante, electrónica...
Y lo mejor, que Yamaha va a sacar a la venta unos cuantos modelos limitados de esta particular WSBK. Ha sido incluso pilotada por Niccolo Canepa, y el italiano "ha fumigado" el actual récord de Le Mans en el Mundial de Resistencia con esta moto. Única, aunque bueno, como todo el garaje.