Como buena marca emergente que es, Mash pretende seguir el buen camino que llevan andando durante los últimos tres años. Su gama no para de crecer y lo hace ofreciendo productos resultones visualmente y a un precio muy ajustado. Fueron de los primeros en localizar el nicho de mercado de las motos retro asequibles, y no les está yendo nada mal.
En total, la compañía francesa cuenta con ocho modelos en su gama, desde las pequeñas 50 cc hasta 400 cc, todas con una imagen que está cautivando corazones año tras año. Para enfrentarse a la Euro 4, todas cuentan con motores que cumplen las nuevas restricciones y no pierden ni un ápice de su aspecto viejuno tan popular.
Estilo retro para todos
Hasta hace bien poco, el que quería hacerse con una moto de aspecto clásico o desembolsaba un pastizal por una moto guardada en un cobertizo durante décadas o desembolsaba otro pastizal por una moto nueva con pinta retro. Hasta que llegó Mash.
Ahora, la gama Mash se compone de un catálogo repleto de cortes vintage que parte desde las pequeñas Fifty con sus propulsores de 50 cc y cuatro tiempos por poco más de 1.500 euros. De ahí en adelante nos encontramos con las Seventy Five y Café Racer de 125 cc (2.445 euros), Fifty Two de 250 cc (3.445 euros), Five Hundred de 400 cc que ya probamos (4.495 euros), TT40 Café Racer (5.495 euros) y la edición especial Von Dutch limitada a sólo 200 unidades (6.595 euros).
Todas aptas para el carnet A2 y con un precio de derribo. Normal que casi hayan duplicado las ventas desde su primer año pasando de 359 unidades matriculadas en 2014 hasta las 688 matriculaciones de 2016, mientras que la previsión de la marca para 2017 es de no vender menos de 750 motos.
En Motorpasión Moto | Mash Five Hundred, toma de contacto (valoración, ficha técnica y galería)