Hablemos de un tema que nos muchos motoristas practican: la limpieza de la ropa de moto. Los que montamos mucho en moto, especialmente por carreteras y autovías y en esta época, casi siempre llegamos con todo el equipamiento con una segunda capa de mosquitos y suciedad.
Es recomendable limpiar el equipamiento de vez en cuando. Sin embargo, y depende de la prenda o accesorio en cuestión, hay que tener ciertas cosas en cuenta. Porque no es lo mismo limpiar una chaqueta de cuero que una de cordura, o un casco.
Así deberías lavar las prendas de tela para moto
Todo en esta vida tiene truco. Si te lo estabas preguntando, sí, las chaquetas, pantalones y guantes textiles están fabricados con un material que debe lavarse con un método determinado, y no de cualquier manera ni en la lavadora.
¿Por qué? Principalmente, porque de no hacerlo así, las prendas textiles se encogerán o se estirarán, y cualquiera de las dos consecuencias es igual de mala. También corre peligro su capacidad de transpiración e incluso la impermeabilidad, atributos principales de ciertas equipaciones.
Entonces cómo se debe limpiar. La respuesta es depende, porque los distintos tejidos como la cordura, el Gore-Tex, D-Dry, etcétera, no siempre emplean los mismos materiales, y por ende, los mismos procedimientos.
Es un mito eso de que lavar las prendas deteriora su capacidad a la abrasión o resistencia a la intemperie. No, lo que provoca eso es la continua suciedad y hasta la grasa corporal. Un proceso de lavado reactiva esas moléculas y fibras impermeabilizantes.
Antes de lavar, lo recomendable es retirar las protecciones. Luego es conveniente dejar en remojo la prenda en agua fría durante media hora (los insectos serán más fáciles de quitar así).
La limpieza en si consistirá en lavar la prenda a mano y no en la lavadora (ahí sí que la prenda corre peligro de dañarse). Agua tibia, jabón y frotar con un cepillo suave para no dañar las fibras. Así de simple, y para secarlas, colgarlo al sol en un lugar fresco y seco.
Briconsejo: ¡nunca utilizar detergente, siempre jabón neutro! El problema de emplearlos es que pueden estirar los tejidos, y la prenda quedará con más holgura.
Esto es aplicable a todos los productos de material similar, como los guantes o pantalones.
Chaquetas y monos de cuero: delicadeza extrema
Desde luego que las chaquetas de cuero para moto merecen un apartado independiente, porque existe mucha disputa respecto a cómo se han de lavar o limpiar para que el material no se acabe degradando.
Recordemos que el cuero ha de ir prieto, y es como nuestra segunda piel, por lo que tampoco nos convendrá que se estire o se achique demasiado.
Empezamos por el forro interior que toda chaqueta de cuero suele traer. Ese sí lo podemos lavar con una lavadora, ya que es un producto textil y no corre peligro.
Lo que no se puede meter en la lavadora es la chaqueta de cuero en sí. Lo más recomendable es humedecer la chaqueta y frotar con jabón neutro. Luego habrá que retirar el exceso de jabón con una esponja. Naturalmente, el interior tampoco lo podemos dejar pasar, por lo que seguiremos exactamente el mismo proceso. Y a secar al aire.
¿Crema hidratante sí o no? Existe una discusión popular entre quienes aplican una crema hidratante al cuero y quienes dicen que no, que eso lo daña. Lo que puede causar problemas es una crema convencional (como una Nivea para personas, por ejemplo).
El cuero proviene de la dermis de ciertos animales, y como piel muerta, tiene ciertas propiedades de resistencia y durabilidad. Cuanto más los cuidemos, mejor. Las cremas que utilizamos para la cara u otras partes del cuerpo están ideadas para pieles vivas, y el efecto de aplicarlo en una piel muerta es que resecará y con el tiempo se acabará agrietando.
Por ello existen cremas acondicionadoras indicadas específicamente para ese mantenimiento. Una vez te hagas con una, el truco no es aplicarlo directamente sobre la piel, sino utilizar una bayeta para extenderla de forma homogénea.
Los cascos también se pueden limpiar, y fácilmente además
Como accesorio fundamental de todo motorista y en continuo contacto con nuestra cabeza, más vale ser higiénicos.
Limpieza por fuera. Conviene evitar un limpiacristales al uso, porque la pantalla de tu casco no está fabricada en cristal. Y créenos que llevar la pantalla del casco rayada, que son tus ojos, es incómodo y peligroso.
Por ello lo conveniente es utilizar jabón neutro, un kit de toallitas especiales de limpieza o bien sprays o pulverizadores específicos para cascos y pantallas.
Limpieza por dentro. Llegamos quizá a la parte más delicada: la de desmontar tu casco. Parece un mundo, pero es extremadamente fácil.
- Dale la vuelta al casco, de tal forma que el interior quede mirando hacia arriba para trabajar con facilidad.
- Suelta las carrilleras, y si el cuello es removible, quítalo
- El acolchado superior suele ir con unos clips; quitarlos es cuestión de tirar con un poco de fuerza. También retira la mentonera y el cubrenariz.
Para lavarlo tampoco es nada recomendable meterlo a la lavadora porque, al igual que el resto de prendas, se encogerá. Con un cubo con agua tibia y un poco de jabón neutro o detergente neutro podrás sumergir dentro las piezas y frotarlas con cuidado. Luego déjalas escurrir al aire libre.
También existen productos específicos como desodorantes o aerosoles para el interior del casco que mantienen la higiene interior.