Probamos la Royal Enfield Meteor 350: una moto retro para el carnet A2 bien construida y asequible que aceptaría algo más de motor
El mercado de motos urbanas para el carnet A2 está sufriendo un repunte. Las marcas se están esforzando por crear gamas accesibles y la Royal Enfield Meteor 350 es posiblemente una de las motos más equilibradas para el público al que se destina.
La Meteor 350 es justo lo que ves: una moto sencilla, sin alardes, con muchísimo estilo clásico y un andar confortable perfecto para los que quieran una moto bonita para el uso diario o para rutear a ritmo tranquilo por poco dinero. Porque lo mejor de la Meteor 350 es que su precio es tan ajustado que apenas supera los 4.000 euros.
Royal Enfield Meteor 350: filosofía Royal
El mercado actual en un porcentaje bastante elevado está influido por las apariencias. No es difícil encontrarnos con modelos que recurren a los golpes de efecto para llamar la atención a base de formas agresivas, apéndices aerodinámicos, tenología desbordante o puro músculo. Nada que objetar, es algo totalmente legítimo.
En Royal Enfield van en la dirección opuesta y se mantienen fieles a los principios que les valieron para conseguir una ingente fama a mediados del siglo XX. Por entonces Royal Enfield era una marca británica que tuvo una aventura industrial en India. Los tiempos cambiaron, la división británica de Royal Enfield no aguantó la presión del desembarco de las motos japonesas en los años 70. Poco después la parte de Royal que seguía viva en India vio una segunda oportunidad.
Años más tarde el mercado estaba empezando a reclamar motos sencillas, con mecánicas fiables y estéticas a la vieja usanza, y Royal Enfield se dio cuenta de que ellos sabían hacer precisamente eso. Habían pasado los años y mientras otras marcas se lanzaron a la innovación y la vanguardia con mayor y menor suerte, ellos seguían fieles a sus diseños originales y mecánicas con una fiabilidad más que solvente, así que se pusieron manos a la obra para atacar de nuevo.
Así es como Royal Enfield se ha convertido en un gigante con cientos de miles de unidades vendidas en India y que mantiene una trayectoria expansiva en mercados donde había perdido su presencia. Incluso se ha hecho con la propiedad de los especialistas en chasis Harris Performance (con experiencia en el mundial de motociclismo) para que desarrolle sus bastidores.
Dentro de esta trayectoria se encuentra la moto de la que vamos a hablar hoy. La Royal Enfield Meteor 350 es la primera de una nueva saga. Estas 350 vienen a sustituir de alguna manera a las anteriores Royal Enfield 500 Classic no aptas para la Euro5 y ya de paso dando un aire más actual y desenfadado, más enfocada al público del carnet A2.
Esta Royal Enfield Meteor 350 es un asteroide que viene con una propuesta sencilla, sí, pero estéticamente muy resultona. Es una moto que se ve aparente, compacta pero sin llegar a ser pequeña con una distancia entre ejes de 1.400 mm y un asiento situado a sólo 765 mm que nos permite llegar de sobra con los pies al suelo.
El aire de roadster clásica empieza con una parte delantera presidida por un incombustible faro redondo y seguida por un depósito en forma de gota de agua fabricado en chapa y coronado por un tapón de combustible con tapa y llave. Un poco más atrás llega el amplio asiento en dos piezas con asas para el pasajero sobre un voluminoso guardabarros rematado por un piloto LED circular.
El apartado estético y mecánico se dan la mano con elementos que se integran bien en el diseño general. Así tenemos unas llantas de aleación de 19 y 17 pulgadas que le dan un aspecto más urbanita que si hubieran sido de radios. El motor está refrigerado por aire con unos marcados aletines y el escape es una única salida recta por el lateral derecho.
Nos ha gustado que la mayoría de los elementos están acabados en negro dando una cohesión a todo el conjunto donde la nota de color la ponen las diferentes pinturas de la carrocería y los cromados, que en el modelo básico sólo aparecen en el cerco del faro, el escape (no en todas las versiones), los muelles de los amortiguadores y las tapas del conjunto de inyección (que por cierto simulan de lejos ser carburadores).
Para rutas tranquilas pero con encanto
Cuando nos montamos en la Meteor 350 nos encontramos con una moto muy amable. El asiento bajo nos permite llegar al suelo de sobra con los dos pies, aprovechando además un arco de las piernas muy estrecho en el que sólo nos puede molestar en alguna circunstancia el escape por el lado derecho.
Por delante nos queda un cuadro de mandos con una interesante combinación. Tenemos una gran esfera en la izquierda con un cuentakilómetros analógico con gráficas muy clásicas y que en su interior encierra una pequeña pantalla digital monocromática que encierra parcial, indicador de marcha, reloj horario e indicador de combustible.
A la derecha tenemos una segunda esfera mucho más pequeña con una pequeña pantalla donde normalmente veremos un reloj horario (sí, otro). Si nos bajamos la aplicación de Royal Enfield esta esfera nos permitirá visualizar las indicaciones de navegación del GPS en modo turn-by-turn de manera esquemática: una flecha con la indicación y la distancia que nos queda hasta el punto.
Si nos disponemos a salir y buscamos los mandos los encontraremos en una posición natural. El manillar es ancho de una pieza en forma de doble cuna que nos deja las manos en un punto relajado para tener los codos flexionados y la espalda recta. Por debajo las estriberas están adelantadas y cubiertas de goma, aunque hay opcionalmente otras estriberas aún más anchas y todavía con más goma.
Cuando vamos a engranar primera nos damos cuenta de un detalle curioso. Esta pequeña Meteor 350 es una de las pocas motos del mercado que recurren a una solución tan retro como la configuración punta-tacón para el pedal del cambio.
Hay que acostumbrarse: para bajar marchas pisaremos la punta delantera y para subirlas pisaremos con el talón. Podríamos subir también levantando la punta de delante pero la posición no es la mejor y hay que hacer un gesto raro con el tobillo. Cuando te haces es cómodo, aunque el ajuste de las piezas no es del todo fino y generan cierto ruido en marcha.
Antes de arrancar nos movemos un poco en parado y la pequeña Meteor 350 permite maniobrar a pulso con mucha facilidad. Llegando bien al suelo, con buena palanca del manillar y con un centro de gravedad colocado muy bajo se deja controlar realmente bien pese a que no es especialmente ligera: 191 kg en orden de marcha.
Salimos y la pequeña Royal Enfield nos deja ver rápidamente su carácter. Es una moto apacible que funciona de manera suave a baja velocidad y que permite un buen confort de marcha gracias a una postura extremadamente relajada.
Su ámbito de actuación es principalmente urbano, pero eso no quiere decir que sea una moto exclusivamente de ciudad. Para nada. Para comprobarlo hemos realizado una larga ruta por la sierra de Madrid por algunas de las carreteras más enrevesadas y tradicionales para los motoristas de la zona centro.
Nos ha gustado el carácter que desprende esta Meteor 350 porque, sinceramente, nos esperábamos una moto que fuera más blanda, más de andar por casa por así decir. En cambio nos hemos encontrado con un chasis de doble cuna de tubo de acero unido a suspensiones convencionales que funciona muy bien.
La horquilla convencional delantera de 41 mm y el doble amortiguador trasero con ajuste en precarga digieren correctamente lo que pasa sobre el asfalto y ni siquiera trazando con las estriberas rozando por el suelo notamos los flaneos que podrían ser típicos en este tipo de motos.
Al contrario. El conjunto de suspensiones tiene un tarado más bien tirando a duro, incluso demasiado seco en el caso del doble amortiguador trasero, demasiado reactivo al pasar sobre badenes o zonas en mal estado. En cambio la horquilla tiene un primer tramo blandito para endurecerse progresivamente.
Este conjunto nos deja un sabor de boca agradable para disfrutar de las carreteras sin prisa, perdidos en medio de la nada. Algo a lo que también ayuda su motor. En este caso estamos hablando de un monocilíndrico con simple árbol de levas en culata con una compresión muy baja (9,5:1) y refrigerado por aire/aceite, así que sus prestaciones no asombrarán a nadie: 20,2 CV y 27 Nm de par motor.
Es un propulsor acorde al propósito de la moto, con un rendimiento suficiente para moverse sin prisas y disfrutar, y con un funcionamiento fino aunque con ciertas vibraciones que nos llegan a los puños y los retrovisores.
Nos ayudará a rodar dentro de los ritmos legales, pero si queremos acometer algún adelantamiento imprevisto no encontraremos demasiada respuesta, así que habrá que jugar con la anticipación. Lo que sí echamos en falta fue una caja de cambios con seis relaciones.
Sólo tiene cinco y son marchas bastante largas; si tuviera seis y más cortas se podría aprovechar un motor que tal y como está configurado empieza a cortar encendido a 120 km/h. En cierto modo la velocidad punta es lo de menos, lo que pasa que nos falta ese punto de respuesta a partir de 90 km/h.
A la hora de llegar a las curvas seguimos notando ese carácter neutro, aunque hay una doble lectura aquí. A un ritmo sosegado el tacto de la dirección es ideal con un comportamiento preciso y suave, ahora bien, si queremos apretar el paso sí que notamos el peso y habrá que obligar a la Meteor 350 a entrar en curva a base de apretar el manillar.
El equipo de frenos por su parte está compuesto por un disco delantero de 300 mm mordido por una pinza de dos pistones y un disco trasero de 270 mm mordido por pinza de pistón simple. El conjunto es suficiente aunque echamos en falta algo de mordiente, sobre todo en el tren delantero para poder dosificar mejor en las frenadas. El tren trasero por su parte es un buen apoyo y sólo se nos hace raro el pedal en sí mismo, como gigantesco.
Royal Enfield Meteor 350: mucho estilo, poco consumo y precio bajo
En definitica, la Royal Enfield Meteor 350 nos ha parecido una compra muy recomendable para aquellos usuarios del carnet A2 que busquen una moto fácil, pintona y con la que disfrutar sin complicaciones. No sabemos qué tal saldrá a largo plazo pero previsiblemente será una moto con la que hacer kilómetros en ausencia de averías.
La gran baza doble de esta Meteor 350 a nuestro parecer es que entra por los ojos y es asequible. Es bonita y aunque los acabados podrían ser mejores es está bien construida al tacto. Una vez en marcha sus potenciales clientes se encontrarán con una moto a la que es difícil decir que no.
Sobre el cuadro de mandos, un apunte: durante la ruta de esta primera toma de contacto realizamos una buena tirada de kilómetros con varias unidades de la Meteor 350. En todas el indicador de combustible mostró un comportamiento errático bajando a reserva para poco después mostrarse lleno hasta la mitad.
Suponemos que tendrá algo que ver con el sensor o su posición, demostrando una sensibilidad demasiado alta a las fluctuaciones de la gasolina en el interior. Llegando en reserva a la gasolinera repostamos 10 litros, por lo que aún quedaban 5 litros más en el depósito.
Lo que sí nos llamó la atención es un consumo muy bajo en torno a los 3 litros a los 100 km, un detalle que para alguien que utilice la moto para desplazamientos cortos diarios puede suponer olvidarse de visitar la gasolinera en más de una semana.
La Royal Enfield ya está disponible en los concesionarios de la marca a un precio que arranca en 4.095 euros para la versión Fireball, la más asequible. A esta la sigue la variante Supernova que añade llantas mecanizadas, parabrisas y respaldo para el pasajero además de retrovisores y escape cromados por 4.345 euros.
Entre medias se coloca el acabado Stellar por 4.245 euros, conservando el respaldo para el pasajero y los elementos cromados pero sin parabrisas ni llantas mecanizadas.
Royal Enfield Meteor 350 2021 - Valoración
6.8
A favor
- Estética muy conseguida
- Facilidad de uso
- Chasis muy estable
- Opciones de personalización
En contra
- Motor justo
- Escasa potencia de frenado
- Vibraciones en el manillar
- Indicador de combustible impreciso
Royal Enfield Meteor 350 2021 - Ficha técnica
Motor | ||
---|---|---|
Tipo | Un cilindro en línea, cuatro tiempos, SOCH | |
Cilindrada | 349 cc | |
Diámetro x carrera | 72 x 85,8 mm | |
Potencia máxima | 20,2 CV a 6.100 rpm | |
Par motor máximo | 27 Nm a 4.000 rpm | |
Compresión | 9,5:1 | |
Caja de cambios | Cinco velocidades | |
Alimentación | Inyección electrónica | |
Refrigeración | Aire/aceite | |
Embrague | Multidisco en baño de aceite | |
Chasis | ||
Tipo | Doble espina de acero | |
Suspensión delantera | Horquilla convencional de 41 mm de diámetro, 130 mm de recorrido | |
Suspensión trasera | Doble amortiguador con ajuste de precarga | |
Freno delantero | Disco de 300 mm con pinza flotante de dos pistones | |
Freno trasero | Disco de 270 mm con pinza flotante de simple pistón | |
Rueda delantera | Llanta de aleación, 100/90-19 | |
Rueda trasera | Llanta de aleación, 140/70-17 | |
Dimensiones y pesos | ||
Lanzamiento | N/D | |
Avance | N/D | |
Distancia entre ejes | 1.400 mm | |
Altura del asiento | 765 mm | |
Depósito | 15 litros | |
Peso en orden de marcha | 191 kg | |
Precio | 4.099 euros |
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