De entre las marcas participantes en el Dakar 2017 no hay ninguna Ducati, pero ahora que en Borgo Panigale están planteándose que quizá podría estar bien llegar a Moto3 en 2019 y que los italianos cada vez se meten más en el mundo offroad la idea no es tan descabellada. Al menos no más que hace dos años cuando Ducati no tenía ningún modelo con aspiraciones fuera del asfalto.
El prestigioso preparador Walt Siegl ha tomado esta idea y ha dado forma a una sublime Ducati Hypermotard, inspirada en el Dakar pero como era hace casi 30 años. Tomando a una Hypermotard de las primeras, con el motor 1100 refrigerado por aire y escapes por arriba ha dado forma a esta preciosidad que nos evoca a las motos que cruzaban las dunas camino del Lago Rosa.
Del Dakar a la carretera con sabor italiano
"Siempre me ha encantado el diseño tan particular de las motos participantes en el Dakar", comentaba el preparador y expiloto Siegl, así que después de un largo café de tres horas con un amigo en Los Angeles la idea comenzó a tomar forma y se puso manos a la obra para llevar ese estilo bestia de las dakarianas vintage a la calle.
Juntar en la misma frase las palabras Hypermotard y vintage no es precisamente sencillo. El diseño moderno y arriesgado de la funbike italiana dista mucho del concepto de Siegl, así que lo primero fue desterrar toda la carrocería. En cambio, todo el chasis, las suspensiones y la parte ciclo se han mantenido intactas, conservando el basculante monobrazo y las preciosas llantas de aluminio que ahora calzan neumáticos de tacos en medidas de carretera.
Con casi 100 caballos de potencia máxima, una potencia más que suficiente para divertirse en cualquier situación, al bicilíndrico Desmodue DS no se le ha metido mano más allá de una nueva línea de escape. Todos los recursos de Siegl se destinaron en la creación de una carrocería con inspiración en las motos de los años '80, "una época difícil para el diseño" según él mismo.
"Fue en aquellos años cuando los diseñadores de motocicletas empezaron a introducir nuevas soluciones como los basculantes monobrazo, sistemas de inyección electrónica, chasis alternativos o piezas de aluminio forjado. Usando los elementos de los '80 también se puede trabajar con la Hypermotard, y con estas suspensiones de serie y su ángulo de dirección se puede combinar bien con un look del Dakar".
Para la creación de la carrocería, Siegl empleó a fondo sus capacidades de escultor, tallando poco a poco un bloque de poliestireno extruido sobre el que dio forma a cada una de las piezas que posteriormente formarían las nuevas líneas de la Hypermotard. Una vez que el bloque tuvo la forma perfecta lo envolvió con fibra de vidrio y masilla sobre el que posteriormente fabricaría los moldes.
El resultado es un vestido de tres piezas fijado al chasis mediante tornillería rápida de aluminio. Sólo hacen falta tres minutos para quitarle toda la ropa a esta italiana con aires del desierto. La guinda del pastel la ponen una pantalla hecha a medida por Gustafsson Plastics (fabricante de pantallas únicas desde 1968) y un juego de faros Hella. Todo aderezado con el cuidado por los detalles típico de Walt Siegl.
Vía | Bike Exif, Walt Siegl Fotos | Daniela María