Que el mercado asiático se fija mucho en el europeo es un secreto a voces. Es raro el salón del sector en el que no encuentras a ingenieros de origen surcoreano observando muy de cerca los productos, ya sean coches o motos, de los principales fabricantes a nivel global. Es más, incluso se atreven a fotografiar hasta el último detalle de los vehículos y a apuntar en una libreta las medidas que obtienen con la cinta métrica.
En este caso al menos no se han atrevido a hacer un juego de palabras para 'copiar' hasta el nombre del modelo pero en una primera ojeada es imposible que la moto de trail denominada Colove 400X no te recuerde al diseño de los vehículos de dos ruedas de BMW.
La moto china está a camino entre la BMW G 310 GS y la F 750 GS
Si estéticamente no es discutible que la apariencia es muy parecida, hay que hacer un pequeño inciso, porque en realidad mezcla elementos de la trail de baja-media cilindrada de la firma bávara y otros de la hermana mayor BMW F 750 GS, que hacen que la apariencia de la Colove 400X sea algo más robusta.
En cuanto al bloque utilizado, el monocilíndrico de 313 cc con 34 CV de potencia y 28 Nm es superado por un motor bicilíndrico con una cilindrada de 378 cc y un rendimiento de 35 CV y 35 Nm, cifras algo superiores a las del modelo germano. Ni que decir tiene que la F 750 GS se come de largo a ambas con el propulsor de dos cilindros en línea y 853 cc, ya que ofrece unas prestaciones de más del doble, con 77 CV y 83 Nm de par motor máximo.
A pesar de lo que muchos puedan pensar y la lógica menor calidad de los materiales usados en la Colove, la 400X incorpora ABS de doble canal y hace uso de una horquilla invertida de 41 mm, dos componentes que equipa también la G 310 GS de BMW.
Otro detalle que se no debe dejar pasar por alto es la capacidad del depósito del modelo chino, que se extiende hasta los 20 litros, cuando en las alemanas se queda en los 11 y 15 litros. Además, la Colove 400X homologa un peso en orden de marcha de 198 kg, que supera los 169,5 kg de la pequeña BMW pero se queda por debajo de los 224 kg del modelo europeo F 750 GS.
La diferencia de precio tampoco es abismal pero seguramente la brecha de calidad entre una y otra será importante, aunque no podemos hablar mucho más a este respecto ya que no es un producto que podamos probar o comprar en nuestro país. Y es que la moto china cuesta 29.800 yuanes, que al cambio serían menos de 4.000 euros, cuando la BMW G 310 GS se vende en España por 6.050 euros.
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