La tercera cita del mundial de Superbikes que se celebra este fin de semana en el circuito de Motorland Aragón servirá para ver si el dominio de Álvaro Bautista y la Ducati Panigale V4 R también se extiende a Europa tras su pleno de victorias en Australia y Tailandia, o si por el contrario Jonathan Rea reacciona en un circuito más favorable a su Kawasaki.
Pero además de la incertidumbre deportiva, otra circunstancia está protagonizando la previa del fin de semana. Se trata de la huelga de trabajadores que el comité de empresa de Motorland ha convocado desde el pasado miércoles hasta el domingo, afectando por tanto a toda la organización del mundial de Superbikes.
Los trabajadores piden equiparación salarial
Según datos del comité de empresa, un 50% de los trabajadores de Motorland están yendo a la huelga, aunque la organización del evento sigue adelante. Los empleados del circuito piden que se cumpla la ley y por lo tanto se proceda a la equiparación salarial con el resto de empleados públicos de otras sociedad de Aragón.
Estos empleados cobran actualmente salarios de entre 30.000 y 35.000 euros anuales, mientras que en Motorland lamentan que solo perciben 22.000 en el caso de los hombres y 16.000 en el de las mujeres. Por esto, los trabajadores están organizando protestas matinales junto al ayuntamiento de Alcañiz.
Desde esta web nos hemos puesto en contacto con la consejería de economía, industria y empleo del gobierno de Aragón, encabezada por Marta Gastón, desde donde nos han manifestado su "respeto absoluto al derecho de huelga". Aunque afirman que "la posición cerrada del comité de empresa no cumple la legalidad".
La consejería afirma que "no podemos llevar a cabo lo que nos piden", y sobre los posibles problemas a la hora de organizar las carreras confían en que "a ver si podemos sacar todo con normalidad. Creemos que podremos sacar todo al día, pero no podemos adivinar el futuro. Estamos a la expectativa".
El circuito de Motorland Aragón es una empresa pública, por lo que está al cargo del gobierno de la comunidad. El pasado martes se produjo una reunión entre ambas partes, pero el acuerdo se mantuvo y el mismo miércoles los trabajadores del circuito decidieron ir a la huelga. Aunque se intente sacar todo con normalidad, la ausencia de gran parte de los empleados se nota.
El comité de empresa afirma que en dicha reunión "no recibimos ninguna propuesta que compensara la situación de los trabajadores", por lo que han decidido seguir adelante con la huelga y además recordar que es extensiva a esos trabajadores que son únicamente contratados para el fin de semana de carreras.
Además el comité de empresa asegura que "el seguimiento el primer día ha sido espectacular", refiriéndose al miércoles 3 de abril, cuando comenzaron los parones. Agradecen a todos los comisarios del circuito maño el apoyo mostrado y por ello los trabajadores lucen un lazo naranja durante las protestan en honor a sus uniformes.
Pese a todo, la agenda del mundial de Superbikes no se ha visto afectada en nada. Los equipos tanto de la categoría reina como de Supersport y Supersport 300 ya están en Motorland desempaquetando sus materiales y dispuestos para salir a pista y comenzar a dar gas en un extraño fin de semana en Aragón.