Llevamos algunas semanas esperando noticias sobre el próximo devenir del Campeonato del Mundo de Superbikes. El hecho de que las dos marcas más potentes de toda la parrilla (Kawasaki y Ducati) dominen con mano de hierro de forma regular no le gusta a Dorna, así que como ya te avanzamos se están planteando la adopción de cambios en el reglamento.
Lo que está claro es que si sólo Kawasaki y Ducati tienen escuadras con un verdadero apoyo oficial detrás invirtiendo recursos y personal es imposible que el resto de marcas puedan acercarse a luchar por la victoria con las monturas rojas y verdes más competitivas del WSBK. Algo que Jonathan Rea ha subrayado de forma contundente a través de Twitter.
"Si Dorna y la FIM convencieran a Yamaha y Honda sus pilotos seguro que ganarían carreras"
Ni siquiera la polémica parrilla invertida que estrenamos este año y que cambia las posiciones de la segunda carrera en función de los resultados de la primera ha logrado que otro equipo que no sea el Kawasaki Racing Team o el Aruba.it Ducati hayan sido capaces de alzarse con una victoria desde mayo de 2016 cuando Nicky Hayden y su Honda ganaron la segunda carrera bajo el aguacero de Malasia.
Dorna sigue centrada en aumentar el espectáculo, hacer que las marcas estén más cerca unas de otras y que se incremente la repercusión mediática. Para conseguirlo están gestando un nuevo reglamento con una normativa muy similar al empleado en la categoría Superstock 1000, un campeonato poblado por motos mucho más similares y pudiendo imponer, además, una centralita única para todas las monturas.
Pero estas intenciones chocan frontalmente contra las intenciones primero de los fabricantes, a los que se les cercaría su capacidad de evolución y desarrollo tanto electrónico como mecánico, y por otro lado a los pilotos. Ellos son la cara más visible y después de que hace un año Chaz Davies manifestara que él "corría para ganar carreras, no a dar espectáculo" ahora ha sido el poco hablador Jonathan Rea quien ha dejado ver su opinión.
Para el piloto británico de Kawasaki el problema no está en el reglamento, sino en cómo se involucran los fabricantes en el mundial de Superbikes. Es curioso ver cómo marcas tan extremadamente potentes como Honda en MotoGP y otros campeonatos mundiales están casi ausentes en WSBK, teniendo incluso mejor moto para las 8 Horas de Suzuka que la que utiliza Bradl (y pilotará Davide Giugliano en Alemania).
Maybe Dorna/FIM could stop playing with regs & convince them to come play. I'm sure BRA, VDM, LOW could win races then https://t.co/ZP6D0TJmE6
— Jonathan Rea (@jonathanrea) 30 de julio de 2017
De una forma bastante tajante, Rea ha dejado un recado a la organización afirmando algo así como que "si Dorna y la FIM dejasen de jugar con los reglamentos y convencer a Honda y Yamaha para jugar seguro que Bradl, van der Mark y Lowes podrían ganar carreras".
Está claro que a día de hoy no todos participan con las mismas armas en la guerra del WSBK, lo ideal sería que todos lo hicieran, pero no cambiando los reglamentos año a año. A partir de 2018 Dorna tiene previsto introducir nuevos cambios que aún no han sido desvelados, pero que afectarán tanto a los pilotos como a los fabricantes, quienes quizá deban aparcar sus proyectos para amoldarse a una nueva (otra vez) normativa.
Acercar las Superbikes a los modelos de serie es uno de los cimientos históricos del campeonato sobre los que Dorna quiere volver a construir el formato y, en teoría, "todos los equipos están de acuerdo, no podemos querer competir con MotoGP" según Carmelo Ezpeleta.
A ver si esto no acaba destruyendo un campeonato que, en teoría, es tan sencillo.