Lo hacía además sobre una Honda CRF250, algo que seguro ha terminado de convencer a los responsables para dar este paso. De hecho, ya el año pasado disputó el Dakar sobre una Honda CRF450 Rally culminando su mejor papel hasta la fecha, la 16ª posición en la general. 2014 no fue más que el fruto de tres duros años de trabajo y esperamos que en 2015 pueda, de nuevo, dejarnos con la boca abierta.
En una carrera donde la fiabilidad de la mecánica es tan importante, tener el apoyo de un gigante como Honda detrás supone un aumento notable de sus posibilidades de cara a conquistar el Dakar. Si Laia consiguiera ganar el título, marcaría un punto de no retorno en la igualdad entre hombre y mujer y los roles que la sociedad les supone/impone.