Toprak Razgatlioglu quiere correr en MotoGP la próxima temporada. Su representante, Kenan Sofuoglu, se ha encargado de confirmarlo, y de comunicarle a BMW su intención de dejar las Superbikes a final de temporada. Pero Yamaha no es su única opción para aterrizar en el mundial de MotoGP.
La opción de Honda también está sobre la mesa. La marca japonesa ha visto en Razgatlioglu al tipo de piloto que andaban buscando y, aunque el hueco que tienen libre en su equipo oficial es el de Joan Mir, no hay que descartar que este furor por el turco le acabe costando el puesto a Luca Marini.
Si Razgatlioglu elige Honda, el sillín de Marini empezará a quemar
En una reciente entrevista Luca Marini ha vuelto a recalcar que no tiene ningún interés en abandonar Honda a final de esta temporada. Algo que es completamente lógico dado su desempeño. La duda es si Honda tiene interés en desprenderse de Marini, y la irrupción de Razgatlioglu puede ser llave en todo este asunto.
Siete Grandes Premios han bastado para que en Honda se den cuenta de que Marini no es el piloto que va a resolver los problemas de HRC. Ni ha puntuado ni se ha caído en toda la temporada, y es evidente que sus opciones de seguir en Honda más allá de 2025 son nulas. Pero en Tokio tomaron una decisión hace unas semanas.
Honda decidió no romper el contrato de Marini en 2024 a no ser que hubiese una alternativa que realmente mereciese la pena. No querían gastarse el dinero de romper el contrato de Marini para subir a la moto a Jack Miller o Fabio Di Giannantonio. Pero parece que Razgatlioglu es el nombre que ilusiona en HRC.
Tanto que Honda ha entrado en la puja con Yamaha para hacerse con los servicios del turco. Pero eso no tiene por qué significar que Joan Mir se vaya a quedar sin sitio en Honda. Al contrario, Mir está en negociaciones para renovar y, aunque aún no haya un acuerdo definitivo, van por buen camino. Romper con Marini costaría en torno a un millón de euros.
A todas estas, Razgatlioglu aún tiene que conseguir salir de BMW, algo que no será fácil, ya que tiene contrato para 2025. Y si lo consigue, aún debería decidir entre Honda y Yamaha, ya que en Iwata parece que sus resquemores han quedado solventados por la salida de Lin Jarvis del equipo japonés.
Desde luego, Razgatlioglu, un icono en Turquía y en la comunidad musulmana, haría a Honda reverdecer laureles a nivel de marketing. En la pista hay más dudas. Lo único seguro es que le pondría más sangre que Marini.