Los pilotos de MotoGP han probado Losail con la pista mojada, y así valoran la opción de correr con lluvia

Tal y como anunciamos hace unos días, el Campeonato del Mundo de MotoGP iba a introducir en los últimos test de pretemporada un ensayo sobre pista mojada. Parece irónico pero la aparición de la lluvia se ha tornado un problema en el desierto en más de un Gran Premio, así que la organización quería probar la viabilidad de realizar la carrera con el asfalto mojado y con iluminación artificial.

Un total de 15 camiones cisterna han vertido miles de litros de agua sobre la pista, para dejar a Scott Redding como el piloto más rápido sobre Losail en condiciones de mojado, puesto que MotoGP nunca había llegado a rodar aquí con agua.

Pilotos a favor de correr en agua, en contra y a medio camino

El problema de que la lluvia aparezca en Losail es más viable de lo que parece. Al caer el sol el índice de humedad se dispara y la posibilidad de precipitaciones se multiplica hasta el punto de modificar los horarios del GP de Catar y dejar a MotoGP como la única categoría en correr por la noche; Moto3 y Moto2 correrán antes del ocaso.

Más que un problema de agarre, que llueva sobre el asfalto catarí implica un riesgo para la seguridad de los pilotos debido a la visibilidad. Al acumularse agua sobre la pista los focos de la iluminación artificial reflejan su luz en los charcos e impiden ver con claridad las referencias, los pianos o las líneas blancas.

Los pilotos se han dividido en tres facciones: los que están a favor de correr con lluvia en Losail, los que no creen que sea viable porque es demasiado peligroso y los que se quedan a medio camino entre una y otra opción.

Marc Márquez se postulaba a favor asegurando que "no hay la misma visibilidad porque con el reflejo de la luz lo ves todo más blanco de lo normal, pero yo creo que si lloviera el domingo de carrera podríamos correr". En el mismo sentido Maverick Viñales apuntaba que "sí, yo creo que sí podríamos correr con agua. He ido detrás de algunos pilotos y hay buena visibilidad".

Valentino Rossi también era optimista y declaraba que aunque él rodó solo notó un grip normal en la pista dentro de lo particular de las condiciones, aunque "quizá rodando en grupo la visibilidad sea peor". Lo mismo que apuntaban tanto Johann Zarco como Aleix Espargaró, aunque el de Aprilia sólo rodó una vuelta.

El extremo opuesto lo encarnaba Jorge Lorenzo, aunque más por problemas de grip. "Si me pides mi opinión, es delicado. Es muy delicado porque el grip es muy, muy bajo, sobre todo en la recta", concluía el mallorquín añadiendo de manera rotunda que "en tercera, cuarta, quinta o sexta patinaba muchísimo y en las curvas tampoco era fantástico. Espero que nunca tengamos que rodar en esa situación".

A medio camino se situaba Andrea Dovizioso. El de Ducati no sabía si mostrarse a favor en contra puesto que salió a rodar detrás de Danilo Petrucci y aseguraba que en la recta con el spray del agua era un poco difícil ver, "y eso que sólo era un piloto. Con más agua en pista y con todos los pilotos rodando lo veo un poco al límite".

"Para mí son condiciones demasiado extremas", postulaba Álvaro Bautista: "Rodando sólo una vuelta detrás de un piloto la pantalla se me ha quedado sucísima y no veía nada, además la luz roja que llevamos en las motos se ve mucho más de noche".

Ahora toca tomar una decisión. Loris Capirossi señalaba que todos deben reunirse de nuevo y poner en común las impresiones para determinar si realmente es viable o no, y añadía que en caso de lluvia en los entrenamientos del Gran Premio es probable que convoquen otro test para sacar mejores conclusiones.

Fotos | MotoGP, Ducati Press, Repsol
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