Se truncaron los planes de Jorge Lorenzo de correr con Yamaha en 2020. Ya se había anunciado que el pentacampeón del mundo correría como wild card el Gran Premio de Cataluña con la Yamaha M1, pero ahora tendrá que esperar. Los equipos han acordado que no haya invitados en la temporada 2020.
La Comisión de los Grandes Premios, en la que están la FIM, los fabricantes y los equipos han decidido que no haya wild cards en 2020 para así aligerar el personal que va a los circuitos. No solo se ahorra la presencia del piloto en cuestión, sino también la de todo su equipo de mecánicos e ingenieros.
También se trunca la opción de ver a Dani Pedrosa de vuelta con KTM
La decisión se enmarca en las medidas de precaución que se están tomando en MotoGP para aligerar el número de personal en el paddock. El objetivo es reducir riesgos de contagios y convencer a los gobiernos de que celebrar las carreras es seguro. Así que las fábricas no podrán disponer de invitados en los Grandes Premios.
Yamaha no acostumbra a hacer wild cards en los últimos años, pero el fichaje de Jorge Lorenzo había trastocado todos los planes. La idea era que al menos corriese en Barcelona, y en función de sus resultados podría plantearse hasta hacer dos pruebas más como invitado. Ahora todos los planes se van al traste.
La medida también afecta a otras marcas. Por ejemplo, Ducati acostumbra a hacer tres wild cards por temporadas con Michele Pirro. Habitualmente, dos son en Italia, las carreras de casa, y el otro en Valencia, la cita decisiva del mundial. También Honda los hace con Stefan Bradl y Suzuki con Sylvain Guintoli. Salvo lesiones, los pilotos reservas verán los toros desde la barrera en 2020.
Un caso particular es también el de KTM. Ahora que empezaban a valorar la posibilidad de que Dani Pedrosa hiciese algún wild card, para recuperar los días de test perdidos, MotoGP lo ha prohibido. Habitualmente, KTM también suele gastar sus carreras de wild card, en este caso con Mika Kallio, pero Pedrosa había sonado como opción para 2020.
Además de la reducción de personal que supondrá, también supone un ahorro económico para las marcas, aunque sea pequeño. Hay que tener en cuenta que cada marca puede hacer tres wild card por temporada, por lo que prácticamente en cada Gran Premio tenemos en pista a al menos uno de estos invitados.
Lo que está pasando con la ausencia de test está siendo una faena para Jorge Lorenzo. No solo porque no va a poder correr con la Yamaha M1 en el Gran Premio de Cataluña, sino porque está viendo como todo su programa de test se va cancelando. Así, a Lorenzo le va a costar recuperar la forma de cara a un hipotético regreso en 2021.
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