Keanu Reeves es un friki de las motos. Además del cine, es también un apasionado de las motos. Su garaje es de ensueño, directamente, pero lo que muchos no saben es que también tiene una fábrica de motos. Se llama ARCH Motorcycle, y es una americanada.
Keanu fundó hace ya unos cuantos años ARCH en compañía de otro socio. Ahora nos cuela en su fábrica gracias al vídeo de Men’s Journal, y enseña cómo se fabrican las motos de su propia marca.
Motos de 85.000 euros y guiños a Matrix
ARCH es una marca relativamente joven, aunque unos cuantos años. Se fundó en 2011, pero hay que remontarse a 2007. Y todo empezó de la manera más casual posible: Keanu ya era friki de las motos desde entonces (y desde joven), y tenía una bonita Harley-Davidson que quería personalizar. Contrató a alguien muy especial.
Hollinger, a quien hizo el encargo, acabó siendo su socio porque Keanu se quedó fascinado. "Fue entonces cuando le dije a Gard: ‘¿Y si hacemos una marca de motos?", revela el propio Keanu en el vídeo. Dicho y hecho. Así nació ARCH.
La fábrica, si bien no es enorme como las megafactorías de Honda, Yamaha, BMW o KTM, tiene su aquel. Se encuentra en California, y para conocimiento de todos, solo trabajan seis personas que se encargan del diseño, el montaje y la fabricación de piezas. En otras palabras: exclusividad.
Hay que tener en cuenta que las motos de Keanu Reeves son especiales... Y nada baratas. La más económica de todo su catálogo cuesta 85.000 euros. "Es realmente especial poder hacer estas motos y conocer a la gente que las pilota", y es que también las personaliza a gusto de cada uno de ellos.
El anfitrión va enseñando toda la fábrica de rincón en rincón, empezando por la Arch KRGT-1, que es el primer modelo. Y curioso, que está hecha al milímetro del piloto: "La intención es que cada moto se adapte al piloto, como un traje a medida: desde los controles manuales hasta las estriberas", narra.
Luego pasa por la ARCH 1S, y hasta la Method 143, que es la moto más top de la marca. "Ambición al límite", y está basada hasta en sus pelis: "Tiene dos modos, como en Matrix: pastilla roja y azul, uno para calel y otro modo loco".
También enseña cómo se diseñan las motos en el departamento de diseño, con el correspondiente dibujo en CAD, que luego se convierte en prototipos "como en Dreamville", dice Keanu.