Honda quiere ponerse a la cabeza de la innovación en lo que a moto y tecnología se refiere. Y para ello la estrategia de los japoneses está siendo bastante evidente: soluciones sencillas a problemas básicos que cualquiera puede tener en una moto.
La última innovación por parte de la marca del ala dorada es un sistema enfocado para los que anden por fuera del asfalto, quizá más ideado para novatos o aprendices que para experimentados: un control de saltos en el aire.
Vendrá con tres modos (A, B y C) e irán de más a menos intervención del sistema
A la larga lista de innovaciones que está preparando hay que sumarle ahora el control de la moto en el aire. Hace poco veíamos el sistema para evitar que sus motos de 400 kg se caigan, o los airbags que envuelven al motorista e incluso el sistema autónomo de asistencia a la dirección en marcha.
Son pequeños pero importantes avances que pretenden facilitar la vida al motorista. Al menos este nuevo sistema cumple con la premisa de poder desactivarse y está pensado para pilotos novatos e incluso con un nivel intermedio. Algo así como el ABS que se puede activar o desactivar.
Esta última idea en forma de patente se llama 'Jump Control' lo que viene a significar una ayuda en salto y está destinado únicamente a las motos off-road de la marca del ala dorada.
Lo que vemos en la patente es una moto dakariana: la Honda CRF450 Rally, lo que nos ayuda a entender el tipo de escenario y piloto para el que está destinado el sistema. La idea principal viene de una cámara que, montada en el carenado, juega con un ordenador de procesamiento de imágenes inteligente.
Como en los coches las cámaras leen las señales y adaptan la velocidad, según Cycle World esta cámara lee las pendientes a medida que el piloto y la moto se acercan. Para ello cuenta con sensores de inclinación que calculan la orientación incluso con la moto en pleno movimiento o en una curva.
Existen tres modos de salto. El modo A, B y C. El primero es el más restrictivo y el que más interviene. Reduce la velocidad a medida que te acercas a lo alto de la pendiente, evitando que las ruedas se despeguen del suelo. Además del acelerador también es capaz de frenar consecuentemente.
Luego está el modo B, para pilotos más experimentados. Con él se podrán hacer saltos controlados, despegándose del suelo pero manteniendo el control en el aire. La forma de actuar es la misma, pero menos intrusiva: manejando el acelerador, y siempre con el objetivo de que la moto aterrice con las dos ruedas.
Y una vez en el aire, viene la parte más curiosa del sistema. Al acelerar, la parte delantera se eleva, y al pisar el freno, baja. Y pensarás: "Eso es algo que ya hace el conductor manualmente". Sí, pero ahora el sistema lo hace automáticamente, quitándole la 'carga' al piloto (y puede que esto no guste a todos). Por último, el modo C es el más libre que permite aterrizar la moto a una sola rueda (la trasera).
Hay que pensar que un día el ABS y el control de tracción de no existían. Y que la llegada de ellos pudo suponer opiniones contrarias. Con ellos acabaron llegando otros tantos sistemas también a las motos que son una ayuda al piloto: el launch control, el anti-wheelie...
Muchas motos de serie como las superbikes de alta gama ya tienen estos sistemas integrados de serie. Y un día parecían imposibles. Pues Honda está haciéndolo paso a paso con el objetivo de mejorar la seguridad poco a poco.