La idea de Cascos Kranium es sencilla, realizar cascos con una estructura de costillas de cartón corrugado. Y parece que el sistema funciona, aunque en un principio el desarrollo se está enfocando hacia los ciclistas, la tecnología podría aplicarse a los cascos de moto. De esta manera se conseguiría un equipamiento seguro a precio muy económico.
Según cuentan esta estructura de cartón corrugado aguanta hasta cuatro veces más que una estructura similar realizada en poliestireno extruido (el corcho blanco que todos conocemos) Además este tipo de estructura resiste cinco impactos seguidos, mientras que el poliestireno en el primer impacto ya se ha deformado sin posibilidad de recuperación.
Otra opción interesante de los Cascos Kranium es que se pueden fabricar muy fácilmente a la medida del usuario. Con solo escanear la cabeza se puede hacer que la estructura encaje a la perfección con nuestras medidas, sin necesidad de moldes ni nada parecido. Además la estructura se puede repetir fácilmente con total precisión al ser piezas independientes que se cortan y se ensamblan en forma de casco.
Ahora solo falta unir esta tecnología con un fabricante de cascos de moto que se atreva a incluirla dentro de una calota de plástico inyectado o fibras compuestas y ya tenemos un casco que seguro cumple con las más duras normas de homologación. El precio también se puede ver muy reducido al no necesitar más moldes para fabricar el relleno interior. Así conseguiríamos que los más reacios a gastar dinero en elementos de protección tan importantes como el casco tengan menos excusas para comprar un casco homologado y en condiciones.
¿Tu te lo comprarías si lo firmase una marca conocida de cascos de moto?
Vía | The kneeslider
Más información | Anirudha Rao