Estamos encantados de que nos sigan llegando nuevas integrantes para el proyecto Yard Built de Yamaha. Cada cual es más espectacular que la anterior, y no se a vosotros, pero a mí esta Speed Iron hecha por Marco Lugato me parece una obra sublime.
Tomando la base de una Yamaha XV950, el taller de Marco, Moto di Fierro, creado en 2009, ha conseguido fabricar una moto oscura y dinámica por igual. Llevando a la tradicional custom hacia un lado más racing, Marco ha conseguido cambiar radicalmente el resultado final materializando una moto preciosa, armoniosa y sin estridencias.
Moto di Fierro. Todo al negro, y un poco al gris
Con una imagen impactante como idea en su cabeza, Marco empezó a modificar su XV950 hacia una vertiente mucho más dura. Los neumáticos gordos consiguen el primer impacto visual sin renunciar a un buen comportamiento en marcha. Ambos se montan sobre sendas llantas Borrani de radios con los aros y bujes en negro.
Para las suspensiones nos encontramos que delante la horquilla convencional ha dejado paso a otra del mismo tipo pero mucho más robusta, la de una VMAX acabada en negro con unas firmes tijas triples. Detrás, el doble amortiguador es ahora Öhlins. En el apartado de frenos también se ha mejorado bastante, el doble disco floreado delantero de 320 mm es mordido por dos pinzas de seis pistones provenientes también de VMAX.
Hechos a mano son el depósito de aluminio y el asiento. No sólo reducen el peso final del conjunto, sino que además la línea visual queda mucho más limpia con unas dimensiones considerablemente reducidas y un acabado fantástico que rompe con la parte ciclo custom original.
El faro delantero es más compacto y moderno, igual que la instrumentación Acewell que se ancla sobre el depósito por detrás de la tija superior y combina información analógica y digital. El manillar ancho ha dejado paso a un kit de semimanillares con contrapesos LSL.
Pero de lo mejorcito de la moto es la trasera. Al subchasis artesanal de estilo minimalista hay que añadir la ausencia de piloto trasero, ya que se sus funciones se integran en los intermitentes, y estos son tan pequeños que casi pasan desapercibidos.
Y para rematar, una melodía profunda y evocadora mana del bicilíndrico ahora a través de un escape 2 en 1 firmado por Arrow. Mucho negro y poco gris para una moto customizada de las pocas que sí me plantearía tener como moto propia. Sin duda.
La Speed Iron, además de un muestrario de la calidad del trabajo de Moto di Fierro, supone un punto de inicio para el desarrollo de la producción de algunos elementos que podrán estar más adelante a la disposición de los particulares. ¡Una gran iniciativa!
Cristian Barelli (coordinador de marketing Yamaha):
Desde que conocí y charlé un rato con Marco en Biarritz, era evidente que compartíamos la misma pasión desmedida por las motos. Uno de los principales aspectos que consideramos a la hora de trabajar con Moto di Ferro en esta creación era que Marco no considerara que esta sería una máquina aislada, sino que debía ser una versión creada sobre la XV950 y al alcance de los usuarios finales.
Marco ha dejado bien clara su huella en la XV950 y tengo que admitir que estoy muy contento con el resultado de la Speed Iron. Tiene un característico diseño Moto di Ferro pero igualmente mantiene la sencillez y el rendimiento de la XV950. Es una moto bonita y divertida de conducir, y con un amplio público de potenciales usuarios Yamaha por delante.