Entre 1993 y 1995, Ducati fabricó la que a día de hoy es una de las piezas más buscadas por todos los coleccionistas de motos. Tal vez, el escaso número de unidades que se fabricaron, un total de 67, sea uno de los motivos principales, pero seguro que el diseño de esta Ducati Supermono es lo que realmente enamora.
La marca de Borgo Panigale construyó esta obra maestra para disputar el campeonato Supermono del cual adopta el nombre. Es un campeonato que aún está vigente en la actualidad y en la que participan motos prototipo con motores monocilíndricos y cuatro tiempos de hasta 800 cc y un peso mínimo de 95 kilogramos.
Un prototipo para echarle imaginación
El diseño corrió a cargo de Pierre Terblanche, que junto a Massimo Bordi y Claudio Domenicali, dieron vida a este prototipo de carreras con ADN puramente Ducati. Estaba cargada de tecnología para la primera mitad de los '90 como inyección electrónica, refrigeración por agua, materiales ultra-ligeros, una parte ciclo de primera y un motor poco convencional. Pronto se convirtió en una de las más competitivas de su clase.
Algunas de las características principales de la Ducati Supermono fueron heredadas de la exitosa 888 Racing. Su motor de 550 cc (posteriormente 570 cc en el año 1995) y 77 cv de potencia máxima estaba colocado horizontalmente. Aunque eso no era todo ni mucho menos, porque utilizaba una “biela simulada” que hacía las veces de segundo pistón para lograr un equilibrio dinámico igual al que poseen los motores gemelos en V de 90 grados.
Esto permitió dejar a un lado los problemas de vibración típicos que producen los ejes de equilibrado o el tener un solo contrapeso en el cigüeñal cuando el motor está funcionando. Sin duda fue un diseño muy ingenioso por parte de Domenicali y Bordi, y con un rendimiento envidiable.
Su peso es otra de las cifras a tener en cuenta. 122 kg era lo que declaraba en la báscula esta Supermono y era gracias al empleo masivo de fibra de carbono que estaba presente en los carenados, el subchasis, el depósito de combustible, la caja del filtro de aire, soportes de las estriberas o el panel de instrumentos. Además, contaba con unas ruedas de tres radios de 17 pulgadas de Marchesini y fabricadas en magnesio.
Las suspensiones eran otro de los puntos fuertes. El prototipo de Ducati utilizaba unas horquillas de 42 mm Öhlins muy similares a las que usaba la 888 Corsa. En la parte trasera un amortiguador DU2041 y un amortiguador de dirección anclado en la parte izquierda del chasis eran proporcionados también por el fabricante sueco y completaban la lista de elementos “pata negra”.
El bastidor se confiaba al típico entramado tubular de la casa de Borgo Panigale, aunque realizado con tubos de sección estrecha para minimizar el peso al mismo tiempo que se garantizaba la rigidez estructural. El basculante en cambio era un cuerpo de aluminio de sección rectangular con refuerzos superiores que se anclaba directamente al motor.
Después de leer la cantidad de tecnologia que llevaba para la epoca en la que salió a la venta y babear contemplando su diseño, es más fácil entender a todos esos coleccionistas que quieren ampliar su surtido con una de estas Ducati Supermono. No me quiero imaginar el precio de venta en la actualidad de una de estas...
Fotos | Ducati