La BMW R7 es uno de esos modelos míticos que todo motorista que se precie debe conocer. Fue una moto pionera en varios aspectos mecánicos, como la horquilla delantera telescópica (la primera que la llevó), y también tuvo un diseño que destacó entre las demás motos de la época por su influencia del Art Decó de los años 20 y 30.
Precisamente de ese modelo restaurado se enamoró Alexander Niznik, un reputado empresario, cuando la vio en el Concurso de Elegancia de Pebble Beach en 2012. Quedó tan sorprendido con la BMW R7 que quiso crear una máquina moderna que se pareciese a esta joya mecánica de hace más de 80 años y el nombre escogido fue Nostalgia.
Tiene la base de una BMW R NineT
La BMW R7 fue un prototipo ideado en 1934 por Alfred Böning. Fue una de las motos más caras de la época y por eso nunca llegó a producirse. En su lugar se crearon dos motos muy parecidas, pero de menor coste (aunque no baratas): la BMW R17 de 1935 y BMW R5 de 1936.
La BMW R7 desapareció durante muchos años y la encontraron en muy malas condiciones y abandonada. BMW Motorrad decidió restaurarla y llevarla a la vida. Es aquí cuando Alexander Niznik, tras verla en una exhibición, creyó que tenía que producir una moto que fuese muy parecida a aquel prototipo de 1934, aunque con las innovaciones tecnológicas actuales.
Niznik le explicó el proyecto Nostalgia a NMoto y aceptaron el reto de construir una moto que tuviese el diseño casi calcado de aquella moto Art Decó, pero que pudiese ser conducida en el siglo XXI.
Utilizaron la base de la BMW R NineT para desarrollar esta nueva moto. Tiene hasta 74 piezas fabricadas a mano entre las que están, por ejemplo, el depósito de combustible de 12 litros y el sistema de escape (que pasa la normativa Euro 4). La mayoría de las piezas están hechas en aluminio, lo que reduce el peso incluso de la BMW R NineT y de la BMW R7 original hasta quedarse en 205 kilogramos.
Su motor de 1.170 centímetros cúbicos refrigerado por agua y aceite entrega una potencia máxima de 110 CV a 7.750 rpm con un par de 116 Nm a 6.000 rpm. Tiene seis marchas y alcanza una velocidad máxima de 225 km/h.
Su diseño retro se complementa con la tecnología que usan las motos actuales como pueden ser: discos de frenos, ABS, el asiento ajustable en altura (736 mm-812 mm), suspensión trasera regulable, iluminación LED, una pantalla multifunción o incluso el arranque sin llave.
La Nostalgia tiene la influencia del diseño del prototipo de 1934 en elementos como el velocímetro ubicado encima del faro delantero, el sillín individual, el motor bóxer, los escapes paralelos al suelo o los guardabarros.
El precio básico de esta motocicleta es de 44.300 euros y debido a que tiene muchas piezas para ser personalizable se producirán solo unas pocas unidades. Ya se puede reservar la moto aunque el plazo de entrega no será antes del año 2020.