Hace unas semanas vi el anuncio de un documental protagonizado principalmente por el ex-furbolista David Beckham. Por lo que pude ver en clips y adelantos en vídeo, David se iba a meter en tierras brasileñas con varios amigos a lomos, y ahora viene lo interesante, de unas Triumph Scrambler convenientemente modificadas. Esto es, personalizadas para quitar todo lo que pueda molestar y conseguir una moto más ligera, tosca y de aspecto más duro. La verdad, os confesaré, es que tenía miedo de ver el documental pero al final me apunté en el calendario la fecha de emisión por BBC1 - sinónimo, normalmente, de calidad.
Ayer llegó el día y a eso de las 21.30h, daba comienzo. Para intentar deshacerme del recelo que sentía por ver en lo que podían convertir un documental – me imaginaba a David Bisbal en Laguna Seca… –, recuperé algunas imágenes de otros tipos famosos y adinerados que montaron en moto delante de las cámaras. Ahí estaba Ewan McGregor, protagonista de dos pedazos de series de viajes e imagen de Belstaff, la popular y extremadamente cara marca de ropa. Vamos, pues, con la parte que menos me ha gustado.
Qué NO me ha gustado de David Bekcham into the Unknown
A David ya lo "conocía" de numerosas entrevistas previas en distintos problemas. Sobre todo en los últimos tiempos, parecía un tipo normal, con la cabeza bien amueblada y un buen sentido del humor (podéis echaros unas risas con el programa de Jimmy Fallon). Aun así, la primera nos la llevamos pronto cuando, al principio del programa, Victoria Beckham, preocupada porque su marido pasará unos días en el Amazonas, pregunta:
– ¿Y qué vas a hacer con el pelo? Porque ya sabes, la humedad… porque te digo una cosa, no puedo ir a países húmedos por mi pelo.
A lo que responde, entre risas, que llevará una gorra. Por suerte, problemas de este tipo y comentarios tan insulsos no se volverán a ver en el resto del documental. Gracias.
Esta escena puntual aparte, hubo otras razones por las que no terminó de convencerme. En primer lugar, siempre dio la sensación de ir con prisa. No sólo la aventura en sí, sino el montaje final. Da la sensación continuamente de que hay que llegar a alguna parte cuanto antes, cuando precisamente eso es lo que querían evitar en un viaje de este tipo. Además existe una preocupación constante por la imagen de los protagonistas… y la razón, supongo, no es otra que el contrato de imagen y colección del ex-futbolista con Belstaff.
Se echa de menos más naturalidad, más calma y momentos de relax. Además, el que supongo es responsable de la seguridad de Beckham, llega a momentos ridículos en el que directamente prohibe que se suba a una pequeña torre usada por pescadores locales.
Qué SÍ me ha gustado de David Bekcham into the Unknown
Pese a todo, al final la sensación general es positiva y nos recuerda las bases del motociclismo. Un tipo que reconoce no haber podido salir a dar un paseo por el parque a solas en 20 años, encuentra en la moto una válvula de escape:
Al ponerme el casco nadie me reconoce… cuando voy en moto no pienso en nada, eso es lo mejor, esa es la razón por la que monto en moto.
Aprovechando los momentos de intimidad entre sus mejores amistadas, cuenta algunas de las anécdotas que ha vivido como futbolista profesional, sobre éxitos y fracasos. Reflexiones que gustará no sólo a los amantes del fútbol, pues son aplicables a prácticamente cualquier situación de nuestra rutina.
Las Triumph que llevan son muy, muy bonitas y ponen aun más de moda el concepto Scrambler, ahora recuperado también por Ducati. Las escenas de Triumphs cruzadas intentando subir carreteras embarradas son una gozada. La obsesión por la imagen tiene también un efecto positivo y es que algunas de las tomas del cámara son auténticos fondos de pantalla. Por otra parte, el excesivo control sobre lo que se puede hacer y lo que no, se ve paliado por la libertad a la hora de hablar de ello.
Por último, merece la pena destacar la parte crítica y motivo del documental. No dudan en mencionar el caos que provocó y provocará la construcción de una autopista a través de tierras de poblaciones indígenas. Y es que, como ya sabéis, la Copa del Mundo en Brasil y todo lo que supone trae innumerables polémicas.
En resumen, es un documental muy ameno, divertido y curioso en el que el motociclismo comparte el papel protagonista. Simplifica y acerca la imagen de un icono del deporte. Su hora y media de duración se hace muy corta y puede servir como la mejor motivación para salir a dar una vuelta en moto.
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Fotos vía | BBC