Ni que decir tiene que como otras muchas modas, poner un escape de bambú a una moto no nace de la mente de un diseñador, estilista o creador de tendencias. Es algo más sencillo y mundano. Y es que ciertamente, la pobreza agudiza el ingenio, más cuando hablamos de un país como China donde los índices de miseria están a la altura del tercer mundo. Así necesidades como cambiar el escape de una moto pasan a un segundo plano. Pero si esto lo mezclamos con un canal de televisión nacional que enseña el escape de bambú en su programa, ya tenemos a miles de conductores chinos cambiando sus escapes.
Mr. Fang Jen, es el dueño de la moto que tiene este “Akrabamboo”. Vive en una aldea cerca de la ciudad de Chongzuo, en la provincia de Guangxi Zhuang. El Sr. Fang no tenía dinero para cambiar su viejo escape y pensó en hacerlo de bambú. El inventor cuenta, que el bambú es fácil de cortar y adaptar a la medida necesaria y aunque no deja de ser madera, es muy resistente a los humos de la combustión.
Además avisa, que como él coge la moto de aquí para allá sin hacerse viajes de cientos de kilómetros, no tiene miedo de que se incendie en marcha. Incluso el Sr. Fang después de probarlo descubrió que era mucho más silencioso que el tubo de escape original de su vieja moto. No quiero ni pensar en qué estado se encontraría el escape original.
Si a esto añadimos el poder mediático de la televisión China, que emitió el reportaje del Sr. Fang con su curiosa y barata solución a base de bambú, ya tenemos la mezcla perfecta para que miles de chinos se pongan manos a la obra construyendo sus escapes de bambú, incluso para sus coches.
Vía | La información