Personalmente, ver a un campeón tirar la toalla nunca gusta. Parece que la palabra campeón no engloba en su definición el concepto "rendirse". Pero tras la caída que sufrió en la primera manga de Brands Hatch el pasado fin de semana, que Bayliss se de por vencido no es más que una evidencia hecha pública. Sus opciones de ganar este año el Mundial de Superbikes son prácticamente nulas, y el australiano es el primero en saberlo: "Reconozco que el campeonato se ha acabado".
Son 97 los puntos que le separan del líder, James Toseland, y el problema es que no sólo debe fallar el británico, sino también deberían hacerlo los pilotos que se encuentran entre ambos. Vamos, que no hay nada que hacer. Troy Bayliss resume así las dos mangas que le han acabado apartando del difícil sueño de revalidar el título mundial: 1ª manga: "Estoy cabreado conmigo mismo. Pensé que me había adelantado en la salida y en cada vuelta estaba pendiente de la pizarra, esperando ver un stop and go. Estuve bastante distraído durante las tres primeras vueltas. Entonces Nori me dio un toque pero pude adelantar a Troy Corser, estaba tirando fuerte y fue en los Druidas cuando la moto se me fue. No me hice daño pero después de eso reconozco que el campeonato se ha acabado".
2ª manga: "No se cómo puede pasar esto con tanta diferencia de temperatura en pista (se refiere a la falta de agarre en su Ducati). Esta mañana estábamos haciendo 26 bajos durante el warm up y ahora nos encontramos con esto, igual que en Brno. No es culpa de nadie pero parece que a nuestra moto no le gustan las temperaturas altas, excepto en Misano donde el agarre fue increíble. Sinceramente pensaba que podía hacer un buen trabajo pero después de la primera vuelta, ya me di cuenta que no iba a ser así, era cuestión de acabar la carrera sano y salvo".
Vía | Daily Motos