España es, indiscutiblemente, la gran dominadora del motociclismo de velocidad actual: Marc Márquez y Jorge Lorenzo se reparten los últimos cuatro títulos de la clase reina, y todo hace pensar que en este 2016 MotoGP también hablará español. También el trial, de la mano de Toni Bou y compañía, así como los raids, donde hasta su reciente retirada, Marc Coma era la rueda a seguir.
David Checa lleva años poniendo sabor español a una disciplina tan afrancesada como la resistencia, mientras Laia Sanz domina el enduro como hacía Iván Cervantes hace una década. Todas las grandes disciplinas de las dos ruedas están ocupadas. ¿Todas? No, una de ellas se resiste: el motocross. Y ahí es donde surge la figura de Jorge Prado, el niño que viene a dominar el barro.
La última frontera y el sueño americano
Pero todavía falta el último escalón, el peldaño más difícil de subir. Conquistar la élite mundial, en cualquiera de sus dos vertientes: el mundial de MXGP, o el AMA Supercross de 450cc. Y este último es precisamente el objetivo del jovencísimo Jorge Prado, el niño prodigio tutelado por KTM que este fin de semana debuta en MX2 en Assen después de quedarse sin hacerlo por lesión en Lommel.
Con la confirmación de que en 2017 disputará el mundial de MX2 a tiempo completo, el campeón de Europa de 125cc tendrá tres oportunidades para aclimatarse en este final de temporada: después de Assen, estará en Estados Unidos para las dos últimas citas del año, en Charlotte (Este) y finalmente en Glen Helen (Oeste). Allí empezará su sueño americano.
Porque inicialmente, el plan de KTM era llevarle a disputar en 2017 el AMA Supercross Costa Oeste de 250cc, pero las necesidades de la marca le han llevado a MX2: la subida a MXGP del gran dominador de la categoría, Jeffrey Herlings, y el pobre rendimiento de Davy Pootjes dejarán al letón Pauls Jonass como punta de lanza, y a su lado estará Prado. Eso sí, en la cabeza del lucense sigue estando el salto al AMA Supercross en 2018.
"Su futuro es inescrutable"
A estas alturas, ya sabemos quién es Jorge Prado y hasta dónde quiere llegar. Si lo conseguirá es algo que sólo el tiempo podrá decirnos, pero de momento todo pinta muy bien. Demasiado bien. Por eso, para hacernos una idea más exacta de Jorge Prado, hablamos con alguien que conoce bien tanto al chico como, sobre todo, la disciplina del motocross.
Se trata de Daniel Magdaleno, experto en motocross en Yamaha Europa, y organizador tanto de la Yamaha Yamalube MX Challenge como de la YZCup. Uno de los mejores conocedores del universo MX en España, y sin duda una voz autorizada para poner en valor a Jorge Prado y lo que esto va a suponer para el motocross español:
El hecho de que Jorge Prado sea llamado por el equipo Factory de KTM es algo tremendamente bueno. Tener a un piloto que ha sido campeón del mundo, campeón de Europa, que está mostrando una progresión tan salvaje año a año es algo muy a tener en cuenta. Es una oportunidad de oro.
El año que viene posiblemente tengamos, no ya a uno como en las épocas de José Butrón, cuando estaba él solo, o a dos como este año hemos tenido a Jorge Zaragoza e Iker Larrañaga, sino la posibilidad de tener a tres pilotos españoles punteros para estar en el top 15 en todas las carreras: Zaragoza, Iker y Jorge.
El futuro de Jorge es inescrutable, no tiene límite, es un pilotazo. Para mí es otra gran oportunidad para ver a otro piloto español oficial cien por cien como es el equipo de KTM, poder ver a Jorge Prado ahí va a ser importante para el motocross español, para el motocross en general y para su carrera.
"Creo que es un poco precipitado"
Después de deshacerse en elogios con el talentoso Prado, llegó el momento de poner los pies en la tierra y pensar en clave de presente. Aunque el gallego tiene abierto el cielo del futuro, Magdaleno considera que hay que ir quemando etapas sin prisa:
Tengo que ver al Jorge Prado del futuro, todavía lo veo muy joven para correr un campeonato del mundo de MX2 sobre una KTM Factory, puesto que está en una época de crecimiento, en plena explosión corporal. Se sigue viendo muy pequeño físicamente al lado de Jeff Herlings o cualquier piloto del mundial.
Está por desarrollar físicamente, por eso no sé hasta qué punto es bueno meter a un chico que el año que viene tendrá 16 años a correr un mundial de MX2 con esa juventud. Sí es cierto que Herlings a su edad ya había empezado, incluso Ken Roczen comenzó con el límite de edad (15 años) e hizo un tercero en la primera prueba. Aunque hay que ver cómo evolucionará Jorge físicamente y como piloto para ver si realmente está capacitado para llevar una MX2 al más alto nivel a estas altura, o si es prudente esperar un poquito más.
Si me preguntas a mí, creo que es un poco precipitado. Yo le dejaría en el europeo un añito más, pero valoraría la situación a mediados de temporada, es muy joven y tiene todo el futuro por delante. Está quemando etapas muy rápido, pero a mí me gustaría que ganase un Europeo de 250cc antes de subir al mundial.
Pero, si Jorge y su entorno se han caracterizado por algo es por haber llevado un timing muy correcto, sin precipitarse y dando los pasos adecuados en cada momento, no cambiaría ni una coma respecto a la agenda que han llevado hasta hoy. Claro está que Roger De Coster, Stefan Everts, Joel Smets o Pit Beirer saben algo más que yo, y quizá meter al chico en el mundial no sea tan precipitado teniendo en cuenta su talento.
En definitiva, y aunque la prudencia sea la nota imperante al hablar de Prado, todas las esperanzas están puestas en él para que España conquiste la última cima del motociclismo.
Fotos | KTM Images