Cuando algo funciona mejor no cambiarlo. Eso es lo que ocurre con la Triumph Bonneville, que lleva vendiéndose casi 50 años y hasta la versión 2009 mantiene su ADN original. Los cambios más destacados en la moto que rinde tributo a los records de velocidad de Bonneville Salt Flats en Utah (EEUU), son las llantas de aleación ligera de siete radios, que le dan un aspecto todavía más retro.
En comparación con el modelo anterior, las nuevas llantas y los guardabarros más cortos, permiten reducir el peso en más de 8 kg, y todo ello se suma a la mayor ergonomía del nuevo modelo, cuyo asiento tiene una altura de solo 740 mm. Por otra parte, la Bonneville sigue manteniendo su característico motor bicilíndrico de 865 cm3, y 67 CV.
En cuanto a las versiones disponibles para el 2009, existe una versión estándar (en color negro o blanco) y la Bonneville SE, con una serie de novedades como las tapas del motor de aleación pulida y los adornos cromados en el depósito, así como la posibilidad de elegir entre el color azul bitono o el blanco. En cuanto al modelo Bonneville T100, se mantiene fiel al estilo de los años 60 pero incluyendo algunas actualizaciones.
Vía | Triumph