O al menos es mi opinión y puedo decir sin miedo a equivocarme que si tuviese en mi poder una Kawasaki Ninja 250 miraría a buen seguro si el kit que ofrece la marca estadounidense Brasse se podría homologar en España para circular con ella. Fijo que otra cosa no pero miradas atraería a cientos con esta Brasse 31BLK.
Lo bonito de este kit es que no necesitas hacerle ninguna reforma de importancia a la moto, ni mecánica ni estructural ni eléctrica. Simplemente hay que desmontar los carenados originales y montar las piezas de las que está compuesto el kit y que os detallamos a continuación.
Faros gemelos Gullwing con bombillas halógenas
Velocímetro tipo dragster
Guardabarros trasero
Plantillas de montaje, manual y herramientas necesarias
Paneles laterales izquierdo y derecho (cuatro unidades)
Asiento del pasajero de desmontaje rápido (opcional)
Carenados inferiores derecho e izquierdo (opcional)
Matricula con montaje lateral (opcional)
Una de las cosas que más llama la atención es la solución que han adoptado para poder llevar el asiento del pasajero a cuestas sin que se rompa la estética de la Brasse 31BLK. Es efectivamente la pieza que aparece en el frontal formada por dos paneles así como los tubos necesarios para introducir en el interior de los tubos que darían continuidad al subchasis en la moto original.
De esta forma podemos ir tranquilamente con nuestra moto y subir a esa chica que se ha quedado encandilada por la presencia de nuestra montura. El precio de esta opción es de 395 dólares (300 euros al cambio) mientras que el precio del kit completo de Brasse para convertir la Kawasaki Ninja 250 en la Brasse 31BLK asciende a 1.695 dólares, unos 1.287 euros.
Vuelvo en un rato, necesito unos instantes a solas...