Puede que para muchos las Gogoro sean unas motos desconocidas. Se trata de pequeñas motos eléctricas que quizá los madrileños ya hayan visto porque han desembarcado en la capital de la mano del servicio de motosharing de Coup y que están bien consolidadas en los mercados asiáticos con hasta seis modelos en su cartera.
Estos scooter eléctricos tienen como el resto de las motos eléctricas de la industria un talón de Aquiles: la autonomía. Para quitar la piedra en el camino que supone el kilometraje limitado en el desarrollo de las motos de cero emisiones la investigación y las alianzas son fundamentales, por eso Yamaha y Gogoro se han unido para buscar una solución.
Gogoro ayudará a Yamaha a crear su primer scooter eléctrico
Mientras que la tecnología actual nos permite el uso de baterías pero con limitaciones en cuanto a peso, capacidad y volumen, algunas grandes marcas como Honda o Kymco y otras no tan grandes como la española Next se han decantado por el uso de baterías extraíbles. De esta manera quizá un paquete de baterías ofrezca una autonomía limitada, pero si podemos cambiarlo por otro paquete cargado al 100% en menos de un minuto estamos facilitando el uso de las motos eléctricas.
Esta misma receta es la que ha seguido Gogoro para sus últimos modelos, con dos paquetes de baterías intercambiables que se ubican en la parte delantera del hueco bajo el asiento y dejan espacio para guardar hasta dos cascos de tipo jet.
Los scooter de Gogoro están asentados en el mercado como una buena solución de movilidad con un diseño resultón y unas prestaciones aceptables, pero no cuentan con el potencial de una gran marca. A Yamaha le pasa lo contrario: más allá de sus bicicletas eléctricas y la excepción de la moto de trial TY-E de batería, no tiene motos electrificadas.
Con sus paquetes de dos baterías funcionando a carga completa, las Gogoro ofrecen una autonomía de hasta 100 km (dependiendo del modelo). La alianza que han creado junto a Yamaha se centrará en desarrollar esta técnica y crear nuevos modelos de scooter eléctricos bajo el emblema de los diapasones.
La unión de la experiencia eléctrica de Gogoro y el potencial de desarrollo de nuevos modelos de Yamaha no se quedará en la creación de nuevos modelos para la marca japonesa, sino que la firma de Iwata además potenciará el proyecto de 750 estaciones de recarga públicas que Gogoro está implantando en Taiwan.
En los próximos años, quién sabe, quizá acabemos viendo las máquinas expendedoras de baterías en la calle como algo normal y puede que incluso Yamaha nos sorprenda con un T-Max eléctrico.