Del país del Sol Naciente nos llega una importante noticia de cara al futuro del mundo de las motocicletas. Honda e Hitachi van a unir sus esfuerzos para crear una empresa conjunta que se dedique a suministrar motores para vehículos eléctricos.
Las dos compañías han firmado hoy lo que ellos llaman un “memorándum de entendimiento”, o lo que es lo mismo un conjunto de promesas para en un futuro poder crear una compañía conjunta con la experiencia de Honda en el mundo de las motocicletas y la de Hitachi en las motorizaciones eléctricas.
Honda apunta hacia el futuro eléctrico
La sede de esta nueva empresa, que no tiene nombre todavía, se instalará en la ciudad de Hitachinaka, y se capitalizará con una inyección inicial de unos 41 millones de euros. La nueva compañía tendrá filiales en China y Estados Unidos con capacidad propia para la producción y venta.
En los últimos diez años, Honda ha estado coqueteando con varias empresas dentro del sector de los motores eléctricos. Dentro del mundo de las dos ruedas, lo hizo con la desaparecida Mission Motors. Con ellos, consiguieron competir en el TT Zero de la Isla de Man en 2014, con el equipo Mugen Shinden y los pilotos John McGuinness y Bruce Anstey.
Todo esto nos lleva a pensar en el interesante prototipo que la marca nipona presentó en 2011: la Honda RC-E que encabeza este artículo. Con un aspecto similar a una Moto2 y unos componentes de primera calidad como las horquillas Öhlins, frenos Brembo y cierto aire retro, consiguieron que muchos de nosotros empezáramos a pensar que eso de la electricidad no estaba tan mal.
Tampoco sabemos si esta alianza irá más allá de los coches, pero seguro que habrá transferencia de tecnologías. A más de uno no le importaría cruzarse con una moto eléctrica de la talla de la RC-E a pesar de no escuchar el BRAAAAP tan característico de un motor de gasolina. El futuro es eléctrico y cuanto antes lo aceptemos, antes apreciaremos la belleza de sus creaciones.
Fotos | Honda