Al acabar el GP de Tailandia había que hablar de una clara mejora de las Yamaha, tras cuatro carreras de sequía, Maverick Viñales se había metido en el podio y Valentino Rossi había sido cuarto pisándole los talones a su compañero. Se presentaba la pregunta ¿Es un salto de calidad o un espejismo?
Ayer Valentino Rossi finalizó cuarto el GP de Japón, al igual que en Buriram. Sin embargo, las diferencias son claras, mientras que en Tailandia solo le separaron 1,564 segundos del primer clasificado, en Motegi esa cifra fue de 6,413.
Valentino Rossi: "Solo pude ser cuarto gracias a que dos pilotos se fueron al suelo”
El viernes, los pilotos de la marca de los diapasones se mostraron confiados de que podrían estar luchando por el podio pues sus sensaciones habían mejorado claramente. Fue tras la clasificación cuando volvieron a verle las orejas al lobo, Johann Zarco con la moto del Monster Yamaha Tech3 se había clasificado segundo y tanto Viñales como Rossi solo habían conseguido meterse en la tercera fila de parrilla. El español señaló que la clave era la diferencia de propulsor de las monturas
Llegó el domingo y con él la carrera de MotoGP, una oportunidad única para volver a evaluar las sensaciones con la YZR M1 que fueron nefastas. Tal y como explicaba Rossi a GPOne tras salir de una reunión con todo el equipo: “No hemos sido tan competitivos como en Tailandia, las Suzuki y Cal Crutchlow tuvieron mucho más ritmo que yo, empecé la carrera pensando que podía subir al podio pero solo pude ser cuarto gracias a que dos pilotos se fueron al suelo”.
Con las caídas de Andrea Iannone y Andrea Dovizioso, Rossi dio dos pasos al frente de la clasificación, de no haber sido así el italiano habría finalizado en un modesto sexto puesto por lo que comentó que no puede estar realmente contento con su cuarta plaza porque están muy lejos de la cabeza de carrera.
El italiano confesó no sentirse escuchado en Yamaha, para ilustrar esta explicación, la definió así en tono jocoso: "Sigo diciendo lo mismo en las reuniones podría llevar a las mismas una foto mía y una grabación". Por si fuera poco, Yamaha corría en casa, por lo que gran parte de la fábrica se desplazó al circuito. Para el italiano fue un buen momento en que mostrarles los problemas de la YZR M1: "Le dije a los jefes que estaban aquí que es importante que vean cómo está la situación en este momento".
De cara al futuro cercano, Valentino Rossi no es demasiado optimista, ha confesado que para al próximo GP de Australia no espera que la situación cambie sobre la moto. Sin embargo reconocía que se trata de una pista que puede favorecerles y podrían hacer un buen trabajo pero eso no solucionaría los problemas que sufre la marca de los diapasones a día de hoy.
El nueve veces campeón del mundo ha opinado sobre el séptimo título mundial que Marc Márquez consiguió en Motegi: "Marc Márquez se lo merecía, ha sido el piloto más fuerte esta temporada".