A Iker Lecuona las cosas le han llegado muy rápido en su carrera como piloto. Con tan solo 19 años, se convirtió en el pasado Gran Premio de Valencia en el tercer piloto más joven de la historia de MotoGP, y el primero nacido en el nuevo milenio. No es más que el sino de su trayectoria. A Moto2 llegó con 16 años recién cumplidos y sin pasar por categorías inferiores.
Tras una buena pretemporada, antes de comenzar la temporada 2020 la pandemia del coronavirus le ha hecho retrasar sus planes, como a todo el paddock de MotoGP. Desde su confinamiento, Lecuona nos cuenta cómo está cuidando su físico, qué espera de 2020, dónde está la KTM y cómo es compartir equipo con Dani Pedrosa y Pol Espargaró.
"Suzuki y Yamaha están por delante, pero con Honda estamos ahí ahí"
- Cuéntanos, ¿qué tal estás llevando la cuarentena?
Bien, dentro de lo que cabe. Haciendo ejercicio, jugando a la Play Station y el ordenador, viendo Netflix... pasando el rato. Estando aquí en casa hacemos lo que podemos, preferiría estar sobre la moto
- Te vimos el otro día en la carrera virtual de MotoGP
Tengo que entrenar un poco más. En la Play suelo jugar más al Gran Turismo, pero a lo que más juego es al ordenador, al Call of Duty o al Counter-Strike, cosas así. Es a lo que más juego yo.
- ¿Cómo lleváis la preparación física estando en cuarentena?
Yo soy de los que hago mucha más moto que físico. Aquí en casa hago mucho rodillo, mucho ejercicio con lo que tengo, la silla, la mesa... Pero en casa prácticamente no tengo material de gimnasio. Mi preparación física era en la moto, hacer muchas horas de motos. Hacía físico igualmente, pero no a tal nivel. Me cuesta más porque no me gusta quedarme encerrado, estoy todo el día fuera, pero lo llevo como puedo. Intento mantenerme dentro de lo posible. Hay gente que lo tiene más fácil que yo. En mi casa no hay nada, así que hago lo que puedo e intento estar al mejor nivel posible para estar listo cuando pase todo esto.
- Precisamente por esto puede que haya que hacer otra pretemporada, ¿no?
Bueno, en el momento en que se pueda salir a la calle todos vamos a ir de cabeza al gimnasio, quien no lo tienen ya en casa, que son bastantes. Los demás, como es mi caso, en cuanto se abran las puertas nos iremos al gimnasio a ponernos otra vez al 100%. En casa intento mantenerme, pero yo mismo me noto cuando hago bici que no tengo movilidad.
Una carrera muy divertida aunque con falta de horas de play, carrera particular con @AleixEspargaro
— Iker Lecuona (@LecuonaIker) March 29, 2020
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A very fun race although with no hours of play, a particular race with @AleixEspargaro #quedateencasa pic.twitter.com/GwHMqbJDuk
- También habrá que recuperar el contacto con la moto
Puede ser. Llevamos un mes y pico sin moto. Subirte a una MotoGP, ponerte a 350 km/h y pretender estar al mismo nivel que antes va a ser muy difícil, más para mí que soy rookie. Ya normalmente cada vez que voy a un circuito nuevo necesito una o dos tandas para hacerme al circuito, así que ahora con este parón necesitaré un día entero.
¿Cuándo crees que se volverá a correr? ¿Sabéis algo?
No. Yo creo que hasta verano no habrá nada. Se irán cancelando carreras o posponiéndolas. No hay sitio para ubicar todas las carreras que están quitando, que son muchas. Ya veremos qué pasa, pero no sé cuándo volveremos.
Se habló de la posibilidad de recuperar carreras de 2020 en enero o febrero, ¿cómo lo veis pilotos como tú, que termináis contrato este año?
Es una liada todo lo que está pasando. No creo que se llegue a hacer eso, pero en el caso de que se haga IRTA y Dorna entrarán por medio para ver los contratos con los equipos y si se recuperan las carreras que faltaban. Hay gente que ya ha firmado con el mismo equipo y no tiene problemas, como los de Yamaha o Marc Márquez, pero el resto terminamos contrato en Cheste. Por ahora eso está muy lejos, no sé decirte
- Más allá del parón, ¿qué objetivos te marcas para este 2020?
Hay que intentar divertirse y aprender. Ésta es una oportunidad que no todo el mundo tiene. Somos 22 pilotos que estamos en la élite, en el top de las motos. Afortunadamente soy uno de ellos. Tengo que aprender y disfrutar. Además, quiero ser el rookie del año, creo que es posible. Vamos a ir carrera tras carrera y viendo qué pasa.
- ¿Entonces te ves capaz de darle batalla a Álex Márquez y Brad Binder por ser rookie del año?
Tenemos un nivel similar. En Cheste terminé primero, en Jerez segundo, en Malasia tercero y en Catar otra vez segundo (entre los rookies). Vamos cambiando las posiciones entre los tres. Estamos al nivel, vamos a luchar por ello, aunque tenemos que mantener la calma y seguir trabajando. Si seguimos en esta línea, podemos llegar a ser campeones. Pero quiero ir mejorando carrera a carrera.
- Además ellos teóricamente tienen la ventaja técnica de estar en un equipo oficial
Márquez lleva una Honda que es muy distinta a la KTM. Con respecto a Binder, llevo la misma moto que él y que Miguel Oliveira, así que es algo que no debería cambiar excesivamente. Por ahora las motos son iguales y estamos muy similares en tiempos y en ritmos. Cuando empiece la temporada veremos qué pasa.
- ¿Cuáles fueron los puntos fuertes y débiles en la pretemporada?
Me vi bastante cómodo. En Malasia sí que lo pasé mal, sufrí los seis días, es un circuito que no me gusta, en el que nunca he ido rápido. Pero en Catar disfruté muchísimo. Hablando con el equipo, vimos que mi mejor vuelta fue en la segunda parte del simulacro de carrera, con rueda usada. Podía seguir a Fabio (Quartararo) y disfruté encima de la moto. He tenido altibajos, lógicamente, pero la pretemporada ha sido bastante positiva. He entendido bastantes cosas, sobre todo los neumáticos, que cambian mucho respecto a Moto2. He cambiado la forma de pilotar. Tengo que seguir mejorando, pero la clasificación de la pretmeporada es positiva.
- ¿Cómo dirías que es la KTM y cómo va tu adaptación a la moto?
Es una moto que tienes que ser agresivo para llevarla, cosa que me viene bien. Todo el mundo dice que llevo una posición agresiva en la moto, y es cierto. Una de las razones por las que fui rápido en Cheste es por esa, igual que Brad (Binder). Tiene muchos puntos fuertes y débiles. Yamaha y Suzuki están por encima, Ducati también, pero con Honda estamos ahí ahí. Al fin y al cabo, si ves los tiempos, resulta que en Catar yo estaba a 1,5 segundos y el decimonoveno. Es algo que nunca había pasado en MotoGP. El 'gap' es muy pequeño. La moto tiene sus puntos. Pol (Espargaró) fácilmente podría estar en el top diez siempre. Binder y yo estamos rozando los puntos. Cada moto tiene su punto fuerte.
- ¿Estás aprendiendo mucho de dos pilotos como Pol Espargaró y Dani Pedrosa?
Con Pol bastante. Con él ya hablé en Cheste y me dijo un par de cosas. Con Dani no hablé hasta Malasia, porque en Valencia no nos vimos, cada uno tenía su agenda. Pero luego con Dani he hablado bastante, me ha dado sus consejos y la verdad es que la experiencia se nota. Luego piensas en sus consejos y te dices a ti mismo: "si es que tiene razón, yo diría lo mismo", pero en ese momento no se me ocurre. Me han ayudado bastante. También Miguel (Oliveira). Cuando tengo que ponerme detrás de él me deja, no pone ningún impedimento, cosa que también se agradece. Para un rookie, tener a un piloto como él, que va rápido en su segundo año, es una buena ayuda.
- Dio la sensación en los test de que KTM y Aprilia estáis más cerca de los primeros, ¿es así?
Las dos motos han mejorado mucho. Estamos más cerca en tiempos y en ritmo, sobre todo porque pilotamos más relajados y eso nos hace ir más rápidos.
- ¿Tenéis miedo a que estos meses con las marcas europeas confinadas y las japonesas trabajando os puedan pasar factura?
Sí. Puede que los otros mejoren. Yamaha tiene que mejorar su velocidad punta y Honda tiene que mejorar prácticamente toda la moto, porque de chasis no iba bien. Suzuki ya va bien de por sí, así que si mejoran más será alucinante. Trabajarán en este año y también en el que viene. Pueden traer modificamos que nosotros no, porque somos una marca europea y está cerrada la fábrica.
- ¿Cómo afrontaste el cambio de pilotar la Moto2 a pasar a la MotoGP en tan solo una semana de cara al GP de Valencia?
No pensé en ello, directamente. En Japón me dijeron que iba a correr este año. Luego en Malasia me llamó mi manager y pensé "a ver qué he liado ahora...". Pero no. Me dijo que Miguel estaba lesionado y que querían que corriese yo en Valencia. Fue todo un shock, muy rápido todo. Toda mi carrera deportiva ha sido híper rápida. En solo cuatro años estoy en MotoGP. Pero intenté no pensar. Lo hicieron oficial el miércoles anterior, pero hasta ese momento estuve haciendo vida normal. Ni pensaba. Quedaba con los amigos, salía por ahí, entrenaba... No decía nada. Estaba intentando despejar la mente para no tener ideas raras.
- ¿En ningún momento se te pasó por la cabeza rechazar la opción?
Al principio sí. Yo quería terminar la temporada con mi equipo técnico, con el que he crecido y prácticamente he nacido. Llevo con ellos desde 2016 y se me pasó por la cabeza decir que no para terminar el año con ellos. Teníamos un objetivo que estar conseguir más de 100 puntos y llegamos con 90 puntos a Valencia, muy confiados de poder hacer un podio después de un carrerón en Australia. Además, tenía una sorpresa. Tenía un casco especial diseñado exclusivamente para mi técnico, que me hubiese gustado llevarlo puesto. Pero era difícil decir que no a una oportunidad así. Aún así, el domingo por la noche, después de la carrera, me fui de cena con mi antiguo equipo. Les dije "me voy con vosotros que paso de mi equipo de MotoGP".
- Existe la teoría de que por físico y por estilo de pilotaje eres más un piloto de MotoGP que de Moto2
Es cierto, yo me salté todas las categorías pequeñas por el físico. A partir de ahí, todo ha sido muy rápido y puede venirme bien subir a MotoGP. Es una moto más potente, para mi estilo estas motos van bien, sobre todo la KTM. Son un cúmulo de cosas que pueden beneficiarme.
- No sé si sabes que eres el primer piloto de MotoGP nacido a partir del 2000, el abanderado de una generación
Sí, leí vuestro reportaje de "Generación Z". También he leído que si sumas mi edad con la de Quartararo no llegamos a la de Valentino Rossi (se ríe).
- Además, ahora que se están retirando dorsales, llevas el 27 de Casey Stoner. ¿Lo admirabas?
Sí, lo admiraba. Yo siempre he llevado el 7, pero cuando llegué al mundial lo llevaba Lorenzo Baldasarri, y yo quería un número que llevase el 7. El 17 no me gustaba, y el 37 tampoco. Así que pensé en ponerme el 27 porque era el de Stoner. Me encantaba Stoner. Las cruzadas que se pegaba con la Ducati eran alucinantes. Yo esperaba ver una lucha entre Márquez y Stoner, es una de esas cosas que a mí me hubiese gustado ver en MotoGP. Mucha gente me lo pone en Instagram. Dicen "el nuevo Stoner" y yo pienso "madre mía...". Al final es un número que llevo porque me gusta, no me mete una presión extra.
- A ver si algún año le van a retirar el número a Stoner y te dejan sin dorsal...
No se si pueden hacerlo, la verdad. Pero creo que Stoner dijo que no quería que le retirasen el número, así que por ahora estoy a salvo.
- Para ir acabando, ¿cómo es la situación económica en el equipo con el rescate financiero que ha llegado de Dorna?
Hervé Poncheral (el director del Tech3, me llamó ayer por la mañana para decírmelo. Cuando no eres un equipo oficial es difícil mantenerte en MotoGP, y más todavía para los de Moto2 y Moto3. Todos sabemos que esta situación está quebrando muchas empresas, y eso es lo que hace que nosotros mismos no tengamos el dinero en el equipo para poder correr. Ya veremos cómo pasa todo. Hay que solucionar este tema, y cuando se pongan plazos fijos de cómo y dónde se va a empezar ya veremos qué pasa.
- Pues por nuestra parte nada más, que tengas muy buen año de debut en MotoGP
Muchas gracias
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