Honda llego al inicio de la pretemporada perdida y da la sensación de que ha salido de Sepang aún más desubicada. La marca del ala dorada ha probado de todo en la primera mitad de la pretemporada, dejando alguna imagen inédita como la de ver cuatro motos diferentes solo en el garaje de Marc Márquez.
Cuando decimos que Honda lo ha probado todo, literalmente es todo. Incluso una moto sin aerodinámica, con los alerones fuera, que dejó totalmente descolocado a Márquez. El crack español ha tenido que ejercer de piloto de pruebas en Sepang mientras Álex Rins y Joan Mir se adaptan, y con Takaaki Nakagami mermado físicamente.
Márquez está contento con su físico, pero no con la moto
De todo lo que ha probado Honda, lo que más llama la atención es la moto sin alerones. Hoy en día ya es una anacronía ver una moto sin aerodinámica, pero Ken Kawauchi, el recién llegado jefe técnico, quería probarlo. El resultado fue que Rins acabó por los suelos, mientras Márquez y Stefan Bradl certificaron que era inconducible.
Al parecer, Kawauchi pretende hacer una moto de cero, y quería ver la Honda de base, sin carga aerodinámica. "Tenemos un nuevo director técnico que tiene ideas nuevas. Hemos probado muchas cosas de concepto, por eso salía a pista con motos tan diferentes. Era necesario para él, así que me he sacrificado para darle esta información", decía Márquez.
Márquez cree que aún así Honda ha dado un paso adelante, "pero los demás también lo han dado". Al octocampeón se le empieza a ver resignado ante el abrumador dominio que ha exhibido Ducati en los test, tan solo respondido en parte por Aprilia. "Toca resolver los problemas de Honda, pero no sé cómo", decía.
"Me han elegido a mí para hacer todos esos experimentos. Ellos tendrán sus razones, simplemente me limité a pilotar. Espero que sea útil para ellos. Ésta no es la moto que necesito para comenzar el mundial", comentaba Márquez. La única nota positiva de los tres días en Sepang ha sido el físico del campeón.
En ese aspecto Márquez explica que se ha encontrado mucho mejor incluso que al final de la temporada pasada. "Ahora puedo decidir cuándo ir deprisa y cuándo lento, algo que el año pasado era imposible. Ahora puedo ser muy preciso con los comentarios", decía. Resistir tres días de test en Sepang son buena prueba de la mejora.
¿El problema? Que con un Márquez al 100% físicamente, va a quedar aún más claro que el fallo no es, ni fue en los últimos años, el físico. El déficit está en la moto.