Hace unos días fuimos invitados por el nuevo importador de Royal Enfield en España a la inauguración de la tienda oficial que han montado en Madrid, y de paso nos propusieron a unos cuantos medios salir por la montaña de Madrid a dar una vuelta en sus motos. Un plan así no podíamos dejarlo pasar, así que nos presentamos en la tienda Royal Enfield de Agustín de Foxá 29 en Madrid preparados para disfrutar de unas motos tan especiales.
Royal Enfield es una de esas pocas marcas que puede presumir de llevar fabricando motos desde hace más de 100 años. Porque la marca empezó a fabricar motos allá por 1901 en Gran Bretaña, y desde entonces no ha dejado de producir vehículos de dos ruedas. Incluso durante las dos Guerras Mudiales del siglo XX siguieron en marcha, aunque la mayoría de sus productos eran para el ejército, seguían siendo motos.
El punto de inflexión para la marca fue en 1955, año en el que se empezaron a fabricar sus motos en India, fabricación que desde 1968 se hace exclusivamente en ese país. En 1994 la marca fue comprada por el grupo Eicher Motors Ltd. y ya en 2011 se construyó la actual planta de producción en las cercanías de Chennai, en la costa sureste del sub-continente indio.
La gama que se ha previsto vender en España es la de 500 cc, con las Bullet, Continental y Classic en su catálogo. La versión que llega a nuestro país con más versiones es la Classic, que encontramos desde 4.649 euros. La Bullet podemos comprarla desde 4.299 euros, siendo la opción más económica de todas, y la Continental, en su versión GT la encontramos por 5.199 euros. Aunque todavía encontramos una versión un poco más cara en la edición limitada Despatch, unos modelos decorados con patrones de camuflaje exclusivos para cada unidad que sale por 5.549 euros.
En todas ellas encontramos el motor monocilíndrico de 500 cc. Excepto en la Royal Enfield Continental GT, que utiliza una versión de ese mismo motor cubicando 535 cc. Esos 35 cc suponen un cv más de potencia para la versión GT sobre la versión "normal". Esto, traducido a cifras quiere decir que la versión más potente está en 29,1 cv a 5.100 rpm mientras que el motor de 500 cc está en 20,3 cv a 5.250 rpm. Ambos modelos están alimentados por una inyección Keihin que cumple perfectamente su trabajo.
Estas cifras, en un mundo en el que si una moto no rinde tres cifras de potencia no es digna de pisar la carretera nos indica bien claro que no estamos frente a unas motos cuya principal baza sean las prestaciones. Nada más lejos de la idea de Royal Enfield. Sus motos no están pensadas para ir exprimiendo el motor hasta el último aliento, sino que apuestan por una conducción más sosegada en la que se disfrute de otros aspectos.
Claro que si sueltas a una pandilla de probadores con motos por la sierra de Madrid lo último que va a pasar es que estos vayan tranquilamente con ellas. Cosas de querer buscarle las cosquillas a la moto que se prueba en ese momento. Una vez hechas las fotos de rigor, necesarias para ilustrar cualquier artículo, se abrió la veda y nos pusimos todos manos a la obra.
Ahí te das cuenta de que Royal Enfield no vende motos neo-retro, ni re-ediciones de motos clásicas. Estamos frente a unas motos clásicas 100%, con todo lo que esto quiere decir en su favor y en su contra. Lo primero que tienes que olvidar es que al llegar a una curva hay que bajar un par de marchas, soltar el embrague y apuntar a la trazada. Si haces esto, seguramente la rueda trasera se bloqueará y tendrás un problema.
Por desgracia en los últimos tiempos se ha dejado de lado los motores con la configuración monocilíndrica, con lo que muchos hemos "olvidado" las peculiaridades de estos. No buscan, ni gustan, rodar en la parte alta del cuentarrevoluciones, ni te exigen jugar con el cambio arriba y abajo para dar toda su potencia. A pesar de que la caja de cinco velocidades las engrana con una suavidad casi perfecta. A no ser que busques a proposito situarte en la zona de máximas vibraciones y no te importen las consecuencias que puedan tener.
Así que tras un primer aviso, tienes que cambiar la idea y dejar que las curvas fluyan con suavidad. A esto ayuda bastante el chasis Harris, las suspensiones Paioli y los Pirelli Sport Demon que monta la Royal Enfield Continental GT. Los frenos están encomendados a un par de discos Brembo, pero no esperes una mordida poderosa, porque la bomba utilizada no es precisamente la más actual y da un tacto que se puede mejorar.
La mejor manera de disfrutar una de estas motos no es ir "al ataque" desde el primer metro. Lo mejor es dejarse llevar y utilizar el par motor para trazar de curva a curva sin buscarte problemas. Sus 44 N·m a 4.000 rpm son lo suficientemente dóciles como para este tipo de conducción.
Eso si, la estética de esta Royal Enfield Continental GT es perfecta. Cuentas con un asiento monoplaza, que se puede hacer biplaza si optas por ese extra. Depósito alargado, con estriberas y semi manillares que no fuerzan demasiado la postura y te sitúan sobre ella de manera clásica. Un enorme escape cromado que preside el lateral y un faro redondo completan un diseño que hubieran querido para si muchos en los años sesenta/setenta.
Esa estética clásica también la encontramos en la Royal Enfield Bullet que me tocó para la segunda parte de la prueba. Parece mentira lo que se puede llegar a echar de menos un sólo caballo en el motor. Porque pasamos de una moto con aspiraciones rácing a otra con aspiraciones totalmente opuestas. En un momento te das cuenta de que la postura, sentado en vertical, con los pies por delante, no vas a apurar las curvas con el mismo aplomo que en su hermana GT.
Los neumáticos Avon 3,25 y 3,5 sobre llanta de 19 pulgadas tampoco te van a transmitir la misma confianza que los Pirelli en medidas 100/90-18 y 130/70-18. Cambiamos los frenos de disco en ambos trenes por un disco delantero y un tambor trasero de modestas prestaciones. Y unas suspensiones, sobre todo la delantera, claramente sobrepasada por las prestaciones del motor. Así que toca bajar un peldaño e ir más tranquilo por las autovías que rodean Madrid de vuelta al concesionario.
Con esto no estoy diciendo que las Royal Enfield sean unas motos malas. Lo que estoy diciendo es que tienes que tener muy claro qué estás comprando para no llevarte desilusiones luego. Creo que su usuario tipo es aquel que no busca una moto fijándose en las prestaciones, ni en cómo puede apuara una frenada en medio de un puerto de montaña. El usuario de Royal Enfield es alguien que quiere una moto con estilo y estética personal. Pero no busca ir lo más deprisa posible del punto A al punto B. Busca divertirse del paisaje que hay entre esos dos puntos, y hacerlo de una forma relajada, asi como si fuera una terapia anti-estress.
¿Encajan en nuestro panorama motero este tipo de motos? Pues creo que si, aunque no sea un modelo ultratecnológico, son unas motos duras y fiables para uso diario. Que aúnan una estética original y agradable a la vista sin tener que dejarte varios sueldos en una personalización. Además en el concesionario Royal Enfield encontrarás una amplia gama de prendas y accesorios para ti que te permitirán ir aún más "a juego" con tu Royal Enfield sin necesidad de arruinarte en el proceso.
Por esto creo que Royal Enfield es una moto que llega a España para quedarse. Su producto es muy especial y personal, pero insisto en que el que se acaba comprando una de estas motos sabe lo que quiere y no acabará decepcionado con ella.
Royal Enfield Continental GT - Ficha técnica
Motor | ||
---|---|---|
Tipo | Monocilíndrico 4 tiempos | |
Cilindrada | 535 cm³ | |
Refrigeración | Aire | |
Diámetro x carrera | 87x90 mm | |
Relación de compresión | N/D | |
Potencia máxima | 29,1 cv a 5.100 rpm | |
Par máximo | 44 N·m a 4.000 rpm | |
Alimentación | Inyección electrónica Keihin | |
Encendido | Electrónico CDI | |
Transmisión | ||
Embrague | Multidisco en aceite | |
Cambio | 5 velocidades accionamiento manual | |
Transmisión final | Cadena | |
Parte de ciclo | ||
Chasis | Chasis doble cuna de acero (Harris) | |
Suspensión delantera | Horquilla telescópica | |
Suspensión trasera | Doble amortiguador Paioli de gas y regulable | |
Freno delantero | Disco Ø 300 mm Brembo | |
Freno trasero | Disco Ø 240 mm | |
Rueda delantera | 100/90-18" | |
Rueda trasera | 130/70-18" | |
Dimensiones y pesos | ||
Longitud | N/D | |
Altura | N/D | |
Anchura | N/D | |
Distancia entre ejes | N/D | |
Altura del asiento | N/D | |
Peso en orden de marcha (sin combustible) | 184 kg | |
Capacidad del depósito | 13,5 litros | |
Consumo medio | N/D | |
Precio | ||
Precio recomendado de venta | 5.199 € | |
Colores disponibles | Negro, rojo y amarillo |
Royal Enfield Continental GT - Valoración
.2
A favor
- Estética insuperable
- Precio contenido para motos de media cilindrada
En contra
- Frenos mejorables en algunos modelos
- Neumáticos de medidas demasiado estrechas en algunos modelos
- Vibraciones
Los gastos de desplazamiento de esta prueba han sido asumidos por Motorien SLU Para más información, consulte nuestra política de relaciones con empresas.
Durante la prueba hemos utilizado una Chaqueta Tucano Urbano Pol cedida por Tucano Urbano S.r.l.
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