Probamos la Aprilia Tuono 660: una naked para el carnet A2 que se separa de la RS 660 por equipamiento y no tanto en precio

Ha tardado en llegar desde que fue anunciada oficialmente, pero la Aprilia Tuono 660 ya ha llegado al mercado. Y ya nos hemos subido a ella para contar nuestras primeras impresiones de una moto a la que, sinceramente, teníamos muchas ganas.

Esta naked deportiva deriva directamente de otra moto muy apetecible, la Aprilia RS 660 que probamos hace algún tiempo y que nos dejó con muy buen sabor de boca. Ahora tenemos la difícil tarea de responder a la pregunta: ¿RS 660 o Tuono 660?

Aprilia Tuono 660: aspirante al trono de las neked para el carnet A2

Aprilia ha vuelto a seguir la misma receta que lleva ejecutando desde 2001 con las Aprilia RSV bicilíndricas y las primeras Tuono: desnudar a las motos deportivas de Noale para crear nakeds de manillar ancho con una verdadera vocación aspiracional. Comparten parte ciclo, mecánica, prácticamente toda la electrónica y una estética similar con un traje más ajustado.

Pero esto no quiere decir que la Tuono 660 y la RS 660 sean la misma moto, en absoluto, hay cambios notables. Lo primero obviamente es la diferencia de vestuario: la Aprilia Tuono 660 deja ver una mayor porción de su mecánica utilizando un carenado reducido, pero en realidad va bastante más vestida de lo que suelen ir las motos naked.

El frontal utiliza un grupo óptico triple dividido por luz diurna en forma de punta de flecha hacia el centro, como en la RS 660, pero sobre un frontal de tamaño más contenido. La pequeña cúpula ahumada queda justo por encima del cuadro de mandos, y la anchura del conjunto es poco más que la propia anchura del faro. Toda la iluminación es LED.

En la vista lateral tenemos unas tapas para los radiadores bastante generosas y una quilla inferior que arropa los bajos por completo. No son piezas que estén por estar. La parte superior esconde un carenado de doble pared con función aerodinámica como en la deportiva mientras que la quilla se extiende para dar cobijo a un sistema de escape que queda oculto con la salida por el lado derecho.

Al llegar a la zaga las diferencias se disipan con un conjunto de colín igualmente afilado para la naked y la deportiva. El asiento y el puntiagudo piloto trasero LED son idénticos, con un largo portamatrículas que sin escape dejan en conjunto una rueda trasera muy expuesta y sujeta por un basculante de aluminio asimétrico de aspecto recio.

Una diferencia sutil pero que está ahí es que mientras las estriberas (tanto del piloto como del pasajero) están en la misma posición, en la Tuono 660 van recubiertas de goma para mejorar el confort de marcha.

Naked con sabor a deportiva

Nos subimos a la nueva Aprilia Tuono 660 y despertamos el trueno que lleva dentro tras pulsar el contacto. El motor bicilíndrico que se oculta en su interior tiene una rumorosidad notable y, además, suena bonito. Se nota que ha llegado en tiempos de Euro 5, pero aun así suena poderoso.

Mientras el motor coge temperatura aprovechamos para familiarizarnos con los (muchos) mandos de una moto que esconde un apartado electrónico al nivel de las mejores de la categoría o, incluso, un paso más en cuanto a posibilidades de ajuste.

Al igual que en la Aprilia RS 660, la Tuono 660 utiliza un cuadro de mandos completamente digital protagonizado por una pantalla TFT a color repleta de información y con menús a los que cuesta adaptarse de primeras. El manejo no es especialmente intuitivo porque hay muchas opciones que manejar, mucha información y el interfaz no facilita la navegación.

Por ejemplo para acceder a los cinco modos de conducción tendremos que utilizar ambas piñas (una piña derecha anormalmente grande, por cierto). Hay tres modos dentro del grupo Road (Commute, Dynamic e Individual -personalizable-) y dos más en el modo Track (Challenge y Time Attack -personalizable-). Tanto para para pasar de Road a Track como para ajustar los modos personalizables tendremos que estar en parado.

Como pasa en la RS 660, la Tuono 660 se siente una moto pequeña. Más aún en este caso donde el carenado se disipa, nuestra postura es más erguida y parece una moto más baja. Aun así la sensación es la de ir encajado gracias a un triángulo ergonómico muy similar con el asiento situado a 820 mm de altura y las piernas sujetas en un depósito esculpido. El asiento es amplio y cómodo, y con un buen tope para el trasero.

Por su parte el manillar va colocado sobre unas alzas notables y su doble altura nos deja las manos en una posición abierta y con una muy buena sensación de control para maniobrar en parado. Accionamos la maneta de embrague (accionado por cable, en una posición muy alejada y sin regulación) y metemos primera. Salimos. Todo parece fácil.

Las sensaciones iniciales se confirman durante los primeros metros en ciudad. Sí es cierto que no tuvimos mucha suerte en esta primera toma de contacto con el modelo, pues la primera mitad de la ruta la recorrimos con el asfalto empapado (precisamente a donde corresponde el único punto de foto de la jornada). En un entorno tan poco favorable, la Tuono 660 se deja hacer y no resulta intimidante.

Como no pudimos centrarnos en otros aspectos fuimos sacando las primeras conclusiones: la posición es cómoda aunque el asiento te tire un poco sobre el manillar, el tacto del cambio es duro y seco, se llega muy bien al suelo con 170 cm de estatura y se siente ligera entre el tráfico urbano con sus 163 kg en vacío y 183 kg en orden de marcha.

A medida que pasaron los kilómetros el suelo se fue secando y pudimos explorar algo más las cualidades de esta italiana. Tampoco demasiado porque la ruta organizada por la marca fue menos acertada de lo habitual. El tacto de la dirección es ágil, respondiendo a las órdenes del manillar ancho que nos permite hacer una buena palanca. Al mismo tiempo se siente estable, aunque quizá no todo lo estable que debería en una comparación directa con la versión R de la que deriva.

Aprilia ha hecho un gran trabajo con el chasis de doble viga de aluminio y una parte ciclo que sin ser despampanante está incluso sobreequipada para el público objetivo al que va destinado. Algo que ya vimos en la RS 660 pero que por algún motivo no resulta tan sólida en conjunto en la Tuono 660.

Me explico. Estamos ante una moto destinada para los usuarios del carnet A2, jóvenes, con no demasiada experiencia. Pese a ello los de Noale ofrecen un conjunto con un muy buen chasis y basculante heredados de la experiencia de Aprilia en competición, hoquilla invertida Kayaba algo más sencilla que en la RS 660 y monoamortiguador con diferente tarado ambos regulables y con un tacto enfocado más a un estilo deportivo que al confort (aunque tampoco llegan a ser unas suspensiones incómodas).

Lo mismo pasa con los frenos, en los que destaca un doble disco delantero de 320 mm mordido por pinzas Brembo radiales de cuatro pistones y una bomba radial de la misma marca montada en el manillar. Es una base con la que incluso se puede entrar en circuito y divertirte con garantías sin la necesidad de irte a motos mucho más potentes, mucho más caras y más difíciles de controlar.

El motor lo hemos dejado un poco para lo último porque aunque pierde algo de potencia en su adaptación al mundo naked mantiene los mismos argumentos que ya vimos en la RS 660.

La Aprilia Tuono 660 equipa un bicilíndrico en paralelo derivado del V4 que montan las motos gordas de la casa, pero seccionado en el vértice de su uve. Es un propulsor con 659 centímetros cúbicos y que va bien apretado de compresión (13,5:1) para generar 95 CV y 67 Nm de par motor. Es decir, 5 CV menos que en la deportiva.

Este recorte apenas se nota en el uso cotidiano porque se han ajustado por el extremo superior. La entrega del motor es correcta en todo el régimen destacando unos medios contenidos pero generosos que con el puño derecho girado a fondo suenan a gloria.

El carácter del motor es vivo y muy reactivo a las órdenes del acelerador (by wire) siempre que lo llevemos en la configuración más agresiva de la electrónica. Es un motor elástico que gira bien desde abajo y que sólo notamos ese recorte de potencia al llegar al corte, donde va desfalleciendo de manera progresiva.

Este genio se acentúa con un desarrollo algo más corto que en la versión deportiva debido a su enfoque más de carretera que de circuito.

Aprilia Tuono 660: diversión a la italiana con margen de mejora

Las curvas que hemos podido hacer con ella no han sido muchas ni estaban en buenas condiciones, así que no podemos establecer un veredicto claro aún (tendremos que esperar a una prueba completa), pero la Tuono 660 es una moto accesible para los más noveles pero al mismo tiempo con un nivel de diversión que puede satisfacer a los más experimentados.

Sí que hemos notado que al menos en nuestra unidad que no había terminado el rodaje se percibía una cantidad notable de vibraciones en el manillar y en las estriberas. Algo que no recordarmos así en la Aprilia RS 660 y que podría deberse al escaso kilometraje.

Otro punto que hay que señalar de la Aprilia Tuono 660 es que el paquete electrónico es más contenido que el equipado en la versión deportiva. En lugar de una plataforma de medición inercial de seis ejes monta una de dos ejes, limitando las posibilidades de sus ayudas a la conducción.

En este modelo no tenemos ni ABS con asistencia en curva, ni iluminación dinámica, ni tampoco tenemos quickshifter (aunque Aprilia va a comercializar uno opcionalmente). Sí conserva los cinco modos de conducción, el control de tracción, ABS, antiwheelie, regulación del freno motor y control de crucero.

Esta decisión de ahorro se ha tomado para poder destinar algo más de presupuesto en mejorar los acabados de un modelo donde por su naturaleza de moto desnuda quedan más piezas a la vista, y es cierto que la calidad percibida parece un pequeño paso por delante en la Tuono 660 que en la RS 660.

Sobre la protección aerodinámica obviamente hay muchas diferencias. La pequeña pantalla nos protegerá como mucho hasta el ombligo así que para ir un poco protegidos tendremos que aplanarnos sobre el depósito.

En definitiva, la Aprilia Tuono 660 es una moto limitable para el carnet A2 que va muy bien equipada pero que también tiene márgen de mejora tanto en equipamiento como en ciertos detalles que tendremos que esperar a confirmar en un análisis completo en una unidad con más kilómetros. Necesitamos más kilómetros, más fotos, más curvas y menos agua para hacer una buena prueba.

Y decimos lo del margen de mejora porque estamos hablando de una moto de 10.850 euros, sólo 500 euros por debajo de una Aprilia RS 660 (11.350 euros) que viene mucho mejor equipada y se siente más precisa. Poca diferencia de precio para las diferencias sustanciales que nos encontramos preliminarmente entre una y otra.

Y pasa un poco lo mismo si la enfrentamos a sus competidoras como la Triumph Street Triple R (9.900 euros), KTM 890 Duke (10.499 euros), BMW F 900 R (8.995 euros) o Ducati Monster (11.590 euros), motos que o son mucho más baratas o están mejor equipadas o con un mejor rendimiento o varias de esas cosas al mismo tiempo. Ahora bien, estéticamente la Aprilia Tuono 660 gana por goleada.

Aprilia Tuono 660 2021 - Valoración

Aprilia Tuono 660 2021 - Ficha técnica

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