Como quien no quiere la cosa, Triumph nos está alegrando el verano. Después de habernos sorprendido con el anuncio de que correrán en Enduro y Motocross con motos propias y que tienen lista una moto a caballo entre una Daytona y una Thruxton gorda, ahora vuelven a la carga.
Los de Hinckley acaban de desvelar un prototipo muy interesante que abre un nuevo segmento que hasta ahora estaba inexplorado por la marca: la Triumph Tiger Sport 660.
Triumph Tiger Sport 660: trail asfáltica a la británica y para todos
Poco a poco la gama de Triumph se va completando, tapando aquellos huecos que podrían ir quedando vacíos y conformando una familia que ya va mucho más allá de las naked y las Modern Classic.
El adelanto de la Triumph Tiger Sport 660 llega para confirmar la hiperactividad de la marca británica, que ahora va a complementar su familia de motos trail con un modelo de corte asfáltico, media cilindrada y posiblemente un precio ajustado.
Al igual que hizo Triumph hace unos meses con la llegada de la Trident (renacimiento en realidad, porque ya hubo otras Trident anteriores), van a utilizar una propuesta apta para aquellos que busquen una moto bajo los estándares de calidad de Triumph, motor tricilíndrico y mecánica accesible.
Es más, aún no tenemos datos, pero la base utilizada será precisamente la de la Trident. La parte ciclo parece muy similar en lo referente a chasis de tubo de acero, basculante, llantas y frenos. La horquilla invertida delantera y el monoamortiguador también parecen calcados, aunque podrían ganar algo de recorrido.
El bloque será el mismo propulsor de tres cilindros con 660 centímetros cúbicos, 81 CV y 64 Nm de par motor que tan buen resultado dan en la Trident. Además habrá a buen seguro una opción para limitar la potencia a 47 CV para los usuarios del carnet A2.
La estética obviamente no tendrá nada que ver, y así la marca consigue dos modelos casi por el precio de uno. La Tiger Sport 660 recibe una imagen de familia, similar a la Tiger Sport 1050 pero convenientemente actualizada con faros más afilados.
Es curioso que el asiento de la Tiger Sport 660 parece muy similar al de la Trident, de una sola pieza, aunque en esta ocasión se prescinde de la tira de agarre por dos asas fijas colocadas a los lados del escueto colín. También es nuevo el anclaje del portamatrículas, que ahora va sujeto al paso de rueda en lugar de al basculante.
A nivel de electrónica es probable que la Tiger Sport 660 herede el mismo paquete que la Trident, con un cuadro de mandos digital, dos modos de conducción, control de tracción desconectable e iluminación full LED.
Con todo esto parece que Triumph tiene preparada una moto que llega directa para competir contra pesos pesados del segmento como la Tracer 7 GT o BMW F 900 XR. Además seguramente lo hará con un precio razonable que no debería alejarse mucho de los 7.995 euros que cuesta la Trident.
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