En el EICMA de Milán nos llamaron la atención muchas motos. Desde scooters rocambolescos a lo MotoGP hasta motos híbridas muy molonas. El caso es que hay una que atrajo particularmente nuestra atención: la Bimota Tera 2024.
Como bien podías intuir, esta moto viene sobrealimentada porque bajo su apariencia de tranquilita crossover tiene el motor de la Kawasaki H2 en dos versiones. Y sí, es tan bruta como parece, aunque parezca una moto más con maletas. Que no te engañe.
Bimota Tera: cuando lo exclusivo es todo
Ante tus ojos tienes probablemente a la sport-trail más lujosa y bruta de todo el mercado. Ya sabemos que Bimota es una marca muy particular y con bastante historia a sus espaldas. Desde 2019, Kawasaki adquirió el 49,9 % de la histórica marca italiana, y la Tesi H2 fue la primera bestia en llegar.
La Tera es la segunda. Entre tanta trail, Bimota veía una oportunidad de negocio sacando la que posiblemente sea la más radical de todo el mercado. Trae el tetracilíndrico de Kawasaki y su particular sistema de suspensión delantera de doble brazo, entre otras chuches.
Es un lobo con piel de cordero. Físicamente vemos una trail asfáltica muy bien terminada, y de buenas proporciones. La Tera nace bajo una evolución del concepto de chasis Tesi, con una carrocería que lleva una combinación de aluminio y fibra de carbono.
La 'gracia' de este sistema es el efecto anti-hundimiento que junto con la suspensión delantera, amortigua y hace a esta moto válida para disfrutar de viajes largos o bien de carreteras reviradas donde se pueda exprimir al límite.
A nivel de parte ciclo remata con suspensión firmada por Öhlins. Operan con amortiguadores Öhlins TTX 36 con depósito piggyback, amortiguación y ajuste de compresión y rebote y ajuste manual de precarga de muelle. 114 mm de recorrido delante y 135 detrás.
La moto confía su frenada a las archiconocidas y deportivas pinzas de freno Brembo Stylema de cuatro pistones opuestos, anclaje radial y discos de 330 milímetros. Para un control máximo trae ABS en curva.
De Kawasaki coge bastantes sistemas electrónicos, entre ellos el Cornering Management Function (KCMF); Traction Control KTRC (3-MODE); Launch Control Mode (KLCM); Intelligent anti-lock Brake System (KIBS); cambio semiautomático Quick Shifter (KQS) y control de crucero electrónico.
El motor es lo que hace que lo llamemos bestia. Es el famoso tetracilíndrico de 998 cc sobrealimentado con compresor. Vamos, el de la Kawasaki H2. En este caso han reducido algo la potencia, hasta los 200 CV a 11.000 vueltas, con un más que suficiente par motor de 137 Nm a 8.500 rpm.
Para emitir un ronco sonido la Bimota utiliza un escape de titanio Akrapovič de serie, con un silenciador de titanio ligero.
Una moto para ricos. La Bimota Tera costará la friolera de 50.000 euros, a lo que hay que añadir impuestos. El que se atreva a comprarla pocos rivales va a tener.