Las ventajas del casco son indiscutibles; es un salvavidas absoluto cuando vamos en moto. Por otra parte es cierto que tiene algunas incomodidades que muchas veces dependen también del tipo de casco que llevemos, la marca, el nivel de insonorización...
Precisamente uno de los efectos es la insonorización y el aislamiento que sufrimos con el casco puesto. Donde unos buscan el efecto extremo que es aislarse totalmente, otros van en la búsqueda de todo lo contrario: estar atentos a lo que les rodea y escuchar cada ruido exterior. Es así como se explica el nuevo invento que no habíamos visto hasta ahora.
Agentes de tráfico ya lo están probando
Es la idea con la que están trabajando una empresa que cree que el sonido y la percepción del entorno es importante para circular en moto. Así que se pusieron manos a la obra para inventar el Bat8D, un pequeño dispositivo que parece un intercomunicador pero que crea el efecto contrario: escuchar todo el sonido ambietne.
El pequeño aparato no utiliza ninguna tecnología revolucionaria ni nada por el estilo: en vez de amplificar o modificar los sonidos que se pierden fuera del casco lo que hace es recuperar la capacidad de oírlos de forma natural.
En vez de trabajar con los 'puntos ciegos' Bat8D trabaja con los 'puntos sordos' que se crean cuando te pones un casco. Es decir, que recupera los decibelios que se pierden con el casco puesto, sea cual sea la marca o la calidad, porque con todos se pierde calidad auditiva por muchos factores como las mismas paredes o el efecto del viento.
Han ido más allá de un simple intercomunicador que se dedica a transmitir el sonido. En el interior del aparato hay unos cuantos canales acústicos y un transductor en forma de cono que transporta los sonidos a través de la calota del casco hasta nuestro oído.
En un planteamiento algo más complejo dicen que el tener los oídos taponados en moto capan las señales que recibe el cerebro combinándolas con las señales visuales para tomar conciencia de la posición del cuerpo y la dirección de la marcha.
Lo único que no detallan cómo se transmite el ruido ambiental hacia el interior. Lo más seguro es que utilicen la propia calota del casco como caja de sonido.
El viento en moto es uno de los grandes enemigos para los motoristas, tanto en el apartado de control de la moto como en el sonoro. Así que ahí va otro de sus objetivos: a través de una serie de filtros acústicos y materiales filtran el ruido de las turbulencias a velocidades de hasta 80 km/h.
Según el fabricante se puede adaptar a cualquier casco integral y casco jet fácilmente. Es totalmente inalámbrico, sin pilas, impermeable, duradero y funciona como las orejas: necesitas una a cada lado del casco para que funcione óptimamente. Además de para motoristas también se puede ampliar su uso para ciclistas o incluso para patinetes eléctricos que lleven casco completo según ha dicho el fabricante.
El invento ya está siendo utilizado en todo el mundo. Uno de los primeros en probarlo han sido los agentes de la policía de tráfico de algunas ciudades de Colombia.