Jorge Martín no fue campeón del mundo de MotoGP en Valencia. Todas las ilusiones del '89' volaron por los aires en dos tramos, primero en la colada rodando detrás de Pecco Bagnaia y después en el accidente con Marc Márquez. Martín perdió, y Pecco Bagnaia es el justo campeón. Pero esta derrota no debería ser el final de nada.
A sus 25 años, en su tercera temporada en el mundial, Jorge Martín ha completado la mejor actuación nunca vista en un piloto satélite. Jamás ninguno había llegado a la última carrera con opciones, y además Martín lo ha hecho demostrando que es el piloto más rápido. Sólidos pilares sobre lo que construir un futuro campeón.
Nunca un piloto satélite había llegado a la última carrera luchando por el mundial
Pecco Bagnaia se ha merecido ser campeón del mundo en 2023. Ha sido el mejor piloto, el que mejor ha gestionado el mundial desde la primera hasta la última carrera, a pesar de verse involucrado en Barcelona en un accidente de los que retiran a un piloto. Discutir eso es ir contra la ciencia, que en MotoGP se traduce en la clasificación general.
Pero eso no empaña ni un poco la temporada de Jorge Martín. Nunca en toda la era MotoGP un piloto satélite había llegado a la última carrera con opciones matemáticas de ganar el mundial. Lo más cercano fue lo de Sete Gibernau en 2003 y 2004, cuando apretó a Valentino Rossi hasta el final de la gira asiática.
"Os prometo que seré campeón del mundo", publicaba Martín nada más perder en Valencia, después de reconocer que le ha faltado experiencia para ganar el mundial. Martín ha sido el piloto más rápido en la segunda mitad de la temporada 2023, pero no ha sido capaz de transformar esa velocidad en victoria.
Elegir el neumático adecuado, no caerse yendo líder destacado o no precipitarse son las herramientas que transforman la velocidad en victorias. Pero son accesorios mucho más fáciles de encontrar que la pieza troncal del negocio de MotoGP, la velocidad. Y esto último Martín ha demostrado tener a raudales.
Ahora toca un frío invierno para pulir detalles. Empezar mejor la temporada, no regalar puntos al principio, creerse aspirante al mundial desde la primera carrera. Con Marc Márquez en Ducati, en 2024 la apuesta será doble. Pero Jorge Martín ha demostrado que lo tiene todo para ser el gran rival del '93'.
Que 2023 no sea el final de nada, sino el principio de una trayectoria de éxitos en MotoGP. El año de la gran explosión de Jorge Martín Almoguera.