Hay una máxima que no nos cansamos de repetir. Aunque la gente conduzca mal, aunque nos pongan en peligro con alguna maniobra, nunca hay que encararse. No es recomendable alimentar la ira de los malos conductores, pero menos aún si lo haces desde una motocicleta en la que tienes mayor facilidad para "expresarte" y en la que al mismo tiempo eres una presa fácil contra psicópatas.
Precisamente este es el caso ocurrido en Brighton donde el propietario de una Honda CBR1000RR Fireblade recriminó al conductor de un Mercedes-Benz C320, Mario Bove, alguna maniobra incorrecta. Segundos después, ese conductor atropelló deliberadamente a la motocicleta hace ahora un año según podemos ver en el vídeo que ha publicado ahora la policía.
Mario Bove: criminal, irresponsable y reincidente
A consecuencia de esta represalia absolutamente desmedida e inhumana, el conductor de la moto de 26 años y su acompañante de 20 resultaron heridos leves mientras que el señor Bove se dio a la fuga del lugar de los hechos. Por suerte en el cruce donde ocurrió el incidente había cámaras de seguridad que recogieron el suceso.
Por desgracia, la grabación por sí misma no era suficiente para identificar al conductor, pero su irresponsabilidad dejó por el camino la matrícula de su coche. Con ella en la mano, la policía procedió a localizar y detener al hombre de 63 años, quien además fue reconocido por el propietario de la Honda como un conocido hostelero de la zona.
Como consecuencia de su actitud durante los últimos meses se le ha adjudicado un año de prisión y la retirada del carnet 30 meses, además de tener que volver a examinarse para recuperar su licencia.