Primero fue Malawi, luego México, más tarde Inglaterra, y ahora India. Las moto-ambulancias tienen en cada país una forma y configuración diferentes, pero su objetivo es el mismo: llegar rápidamente allí donde los vehículos de cuatro ruedas son incapaces. La actuación de esta aplicación de motocicleta dista mucho de la pasión motera, pero los motoristas podemos estar bien orgullosos.
El estreno de la moto-ambulancia en India tuvo lugar hace unos meses en Ongnarpal, una pequeña localidad perdida en la profundidad de la jungla de Chhattisgarh. Debido a la densidad de su vegetación, los coches son incapaces de transitar con fluidez, pero una moto con un sidecar adaptado fue capaz de llevar a Sukmi, una mujer que había roto aguas, hasta el hospital de Narayanpur donde dio a luz a una preciosa niña.
A grandes males, ideas sencillas
Después de su flamante estreno, la moto-ambulancia ha seguido salvando vidas en regiones remotas de India, facilitando una atención médica mucho más rápida a personas que de otra manera habrían muerto de forma irremediable.
Hasta ahora, han sido 200 mujeres embarazadas las que han salvado sus vidas o las de sus hijos gracias a las moto-ambulancias indias, haciendo descender considerablemente el nivel de de mortalidad infantil en la región. De los 300 pacientes que hasta ahora han sido llevados al hospital, un 80% han sido mujeres embarazadas.
El proyecto se impulsó hace un año por UNICEF, el departamento de sanidad del gobierno indio y la ONG Saathi Samaj Sevi Sanstha.
Ajay Trakroo (especialista en sanidad de UNICEF):
Las mujeres embarazadas son nuestro objetivo principal, su tasa de mortalidad en regiones tan remotas como Chhattisgarh es demasiado alto. Con este experimento estamos intentando proveer de una atención médica que carecen las mujeres embarazadas que viven en zonas boscosas.
Por el momento sólo hay una moto-ambulancia en esa zona y 108 en total en Narayanpur, pero tras el éxito inicial se está trabajando para expandir el proyecto con más de estas motocicletas adaptadas. Al mismo tiempo, el Instituto Nacional de Tecnología está trabajando para mejorar el diseño y aumentar la eficiencia de estos vehículos con mayor potencia y estabilidad.
Pero lo mejor de todo es que no hace falta un vehículo excepcional, ni una idea compleja. Este tipo de vehículo médico es brillante por su sencillez, ya que no es más que una moto de cuatro tiempos de las que hay a patadas en India con un sidecar cubierto por una pequeña lona.
Los encargados de ponerse a los mandos son conductores locales, cuyo únicos requisitos para el trabajo son conocer muy bien la zona donde van a trabajar con las rutas más cortas hasta los centros médicos y unas nociones básicas de medicina para ofrecer una atención básica si fuera necesario.
A veces lo más simple es lo más efectivo. ¡Gran iniciativa!
Vía | New India Express