En BMW ya abrieron el camino de los maxiscooters hace 6 años y desde entonces no han parado de trabajar en ese segmento que a día de hoy es uno de los más importantes en las ventas. El último trabajo en ese campo llega de la mano de la C 400 X.
Este nuevo modelo de BMW busca su hueco en los maxiscooters de tamaño medio, intentando encontrar el equilibrio tan necesario entre una buena movilidad con las necesidades propias de carreteras más abiertas y de la circulación en vías rápidas.
Agilidad y utilidad como concepto base
El propulsor de la C 400 X es un monocilíndrico de 34 cv a 7.500 rev/min que es más que suficiente para el uso urbano y que tampoco se queda demasiado corto en su uso en autopista. Para conseguir sacar el máximo rendimiento al motor, el C 400 X incorpora una caja de cambios CTV de transmisión variable continua.
Como es habitual, un brazo basculante de gran resistencia a la torsión se encarga de llevar el movimiento hasta la rueda. Este conjunto ha sido diseñado con el objetivo de reducir al máximo las molestas vibraciones, pensando en ofrecer el mayor confort posible. Eso sí, la C 400 X cuenta con control de tracción para evitar posibles sustos en el día a día.
Para enmarcar el motor bávaro, la C 400 X tiene un chasis multitubular de acero que aporta la rigidez necesaria para este tipo de motos. A la hora de mantener las ruedas pegadas al suelo en todo momento, en BMW han optado por poner una horquilla telescópica convencional y un doble amortiguador trasero.
Los frenos de la C 400 X funcionan comandados por el ABS que actúa sobre los dos discos del tren delantero y sobre el disco trasero para impedir que las ruedas se bloqueen en frenadas fuertes o sobre asfaltos deslizantes.
A la hora de abordar el aspecto de la C 400 X, los ingenieros alemanes han decidido coger un camino intermedio entre lo estético y lo útil. Si bien otras maxiscooters tienden a ser muy voluminosas y dan aspecto de ser demasiado grandes, esta BMW equilibra muy bien este plano. Sus líneas son modernas y tiran más por el concepto minimalista, dando un resultado final muy llamativo pero contenido.
Este aire deportivo no está reñido con la practicidad, ya que además de ofrecer una buena protección para el conductor, cuenta con espacios dedicados al almacenamiento y también con hueco para el casco bajo su gran asiento continuo que está pensado para que el confort no se vea afectado. La carrocería la podremos elegir en dos colores, ya sea en azul cénit o blanco alpino. Para acabar de rematar ese aspecto rompedor, en BMW han incorporado a la C 400 X unas ópticas de tipo LED con un diseño llamativo.
Con los conceptos moderno y urbano grabados a fuego, los alemanes han equipado a su scooter menor con un sistema avanzado de conectividad. La tecnología está muy presente y una prueba de ello es la posibilidad de conectar el teléfono y de poder escuchar música mientras la conduces. Para controlar todas estas opciones, la C 400 X cuenta con una pantalla de 6,5 pulgadas y el sistema multicontroller para ir navegando a través de la interfaz.